De acuerdo con la organización, dos firmas italianas, Pasubio y Gruppo Mastrotto, importan cuero procedente de ganaderías que deforestan e invaden el territorio ancestral del Pueblo Ayoreo, uno de los últimos grupos de indígenas no contactados que viven fuera de la cuenca amazónica.
Posteriormente ese cuero se utiliza en los interiores de los coches fabricados por BMW y Jaguar Land Rover, indicó Survival International en un comunicado.
En el escrito, la ONG explicó que hace unas semanas envió cartas de cese y desistimiento a ambas empresas italianas, en las que instaba a detener las importaciones, pero solo obtuvo respuesta de Gruppo Mastrotto, con quien mantiene "un diálogo en curso".
Sin embargo la otra empresa, Pasubio, respondió de manera negativa y la organización presentó una queja en el “Punto Nacional de Contacto” (PNC) de Italia para la OCDE, en virtud de las directrices estipuladas por este organismo para las empresas multinacionales.
Otro informe, elaborado por la ONG Earthsight reveló que casi dos tercios de las pieles exportadas desde Paraguay van a parar a empresas italianas, principalmente a Pasubio, cuyos ingresos anuales de 313 millones de euros dependen en un 90 % de la industria del automóvil.
"El Gobierno paraguayo ha entregado la mayor parte del territorio ancestral de los ayoreo a empresas agroindustriales que están deforestando el bosque sin tregua: primero cortan los árboles con la madera más valiosa, después prenden fuego al bosque y, por último, introducen el ganado", describió Teresa Mayo, responsable de esta campaña de Survival.
Mayo denunció que los indígenas "se ven obligados a vivir en una huida constante de las excavadoras" que penetran en los bosques.
Por su parte, la directora de Survival Italia, Francesca Casella, subrayó que "se prevé que la demanda de cuero para automóviles aumente más de un 5 % anualmente hasta 2027".
"Los clientes y consumidores finales deben ser conscientes de la situación, y dado que Italia es la mayor compradora mundial de cuero paraguayo, tiene el poder y la responsabilidad de intervenir dejando de hacer negocios con ganaderías que operan en territorios indígenas ilegalmente con la complicidad de políticos y funcionarios corruptos", añadió.