La plataforma compuesta por la asociación de países isleños, el G77 (países en desarrollo), China, los países africanos y la Asociación Independiente de América Latina y el Caribe (Paraguay, Costa Rica, Honduras, Guatemala, Panamá, Perú, Chile) comparecieron ante los medios para dar "una fuerte señal política" de su determinación para obtener "acciones" y no "promesas" al término de la reunión.
Particularmente, salieron al paso de los primeros documentos oficiales puestos a debate que se difundieron este jueves que no incluyen referencias a las pérdidas y daños, las compensaciones para los países en desarrollo más afectados por el cambio climático que no han sido responsables de las emisiones que lo han causado.
La exigencia común es que debe establecerse en esta COP27 un fondo para las pérdidas y daños, que debe ser dotado de recursos, como resumió en la comparecencia el representante de AILAC, el colombiano Francisco Javier Canal.
"Este fondo debe establecerse en la COP27 y debe ser dotado de recursos financieros nuevos, adecuados, predecibles (...) Tiene que ser financiación basada en donaciones y todos los países en desarrollo tienen que poder acceder a estos recursos", dijo Canal.
Los reclamos fueron dirigidos directamente a los países desarrollados y sus líderes en las negociaciones, a los que pidieron que asumieran la necesidad de tomar "decisiones fuertes" y "susceptibles de mejorar las condiciones de vida de millones de personas" víctimas del cambio climático, ante la perspectiva además de que las catástrofes climáticas se "intensifiquen ante el escenario actual de emisiones", como indicó el ministro senegalés de Medio Ambiente, Alioune Ndoye.
Por su parte, Sherry Rehman, ministra para el Cambio Climático de Pakistán, en representación del G77 y China matizó la posición de la plataforma e indicó que "no se busca arrinconar" a los países desarrollados en este asunto, pero sí que vean que "lo que hay que hacer es cerrar el abismo entre las promesas y las acciones".
Rehman descartó que el grupo vaya a salirse de las negociaciones si no logran estos avances, pues los "políticos no salimos de negociar, sino que negociamos una salida", pero que seguro "pondrá lo máximo" en este esfuerzo.
En declaraciones a EFE, Joyelle Clarke, ministra de Desarrollo Sostenible de San Cristóbal y Nieves, país que forma parte del grupo negociador de las islas, apuntó que si bien "aún no se puede considerar" que esta COP27 es una cumbre "fallida", y pese a tener "un poco de esperanza", claramente "sigue defraudando" a los países que exigen la financiación de las pérdidas y daños.
"No puede ser sólo un tema de la agenda. Otros asuntos han sido considerados en las negociaciones y hemos sido flexibles para entender posiciones de los países desarrollados. Pero no hay nada para nosotros", se lamentó.
Clarke afirmó que el grupo de los países isleños aún no llegó al punto de salirse de las negociaciones si esto no se considera, pero también apuntó que "estamos camino de eso".
"Necesitamos pérdidas y daños. Es para responder a los daños, es para garantizar nuestra supervivencia", indicó.