La declaración del régimen fundamentalista se produce en un contexto en el que varios deportistas iraníes manifestaron su solidaridad con el movimiento de protesta desencadenado a mediados de septiembre en Irán tras la muerte de Mahsa Amini mientras estaba detenida.
Mahsa Amini había sido arrestada por la policía de la moral por violar el código de vestimenta de la República Islámica de Irán, que obliga el uso de velo en público.
“Niloufar Mardani participó sin autorización en una competición de patinaje de velocidad en Turquía”, anunció el ministerio de Deportes y Juventud iraní. “Esta atleta no llevaba el atuendo aprobado por el ministerio”, agregó, precisando que la deportista “ya no era miembro del equipo nacional desde el mes pasado”.
Según la misma fuente, participó a título “personal” en la competición, en la que el equipo nacional iraní no estaba inscrito.
Mardani, miembro del equipo nacional de patinaje de velocidad desde hace más de una década, recibió una copa el 6 de noviembre en Estambul durante una ceremonia en la que no llevaba el velo, según la prensa local. Vestía una camiseta negra en la que aparecía “Irán” en blanco.
En octubre, la deportista iraní Elnaz Rekabi participó en una competición de escalada en Seúl con sólo una cinta en la cabeza, lo que se interpretó como un gesto de solidaridad con las manifestaciones en Irán.
La República Islámica impone a las deportistas iraníes el uso del velo incluso en las competiciones en el extranjero.