En un vídeo difundido en las redes sociales por las manifestantes este domingo se ve a decenas de estudiantes plantadas en la puerta de una universidad en la provincia de Badakhshan, asegurando que las autoridades del Gobierno islamista les impidieron la entrada por su vestimenta.
En la grabación, las jóvenes estudiantes aseguraron que aunque llevaban puesto un hijab, el miembro del Ministerio de Propagación de la Virtud y Prevención del Vicio no les permitió ingresar a la universidad debido a que no tenían burka.
Lea más: Las tres prisiones de la mujer afgana: burka, casa y gobierno
“Por no llevar burka el miembro de Propagación de la Virtud y Prevención del Vicio no permite el ingreso de las estudiantes a la universidad”, aseguró una joven.
Otro vídeo muestra a un funcionarios de las fuerzas de seguridad de los talibanes golpeando a una de la chicas con un palo para dispersar la protesta que se desató en las puertas del recinto.
Mujeres sin burka no pueden entrar
“Las mujeres que tienen el velo pueden entrar orgullosamente a la universidad, pero las que no tienen burka no pueden entrar”, dijo el oficial a las jóvenes.
A diferencia del burka que cubre a las mujeres de pie a cabeza, el tipo de hijab que llevaban algunas estudiantes dejaba su rostro parcialmente descubierto.
En Afganistán las estudiantes universitarias están obligadas a usar el velo para asistir a clases además de otras medidas impuestas por los fundamentalistas que restringen severamente a las mujeres.
Junto a las prohibiciones sobre la libertad de movimiento, acceso al trabajo y la vestimenta, los talibanes han impedido también a las niñas asistir a la escuela secundarias desde hace más de un año.
Pese a que prometieron que habían cambiado, los talibanes han repetido el comportamiento de su anterior régimen entre 1996 y 2001, cuando en base a una rígida interpretación del islam y su estricto código social conocido como pastunwali prohibieron la asistencia femenina a las escuelas y recluyeron a las mujeres en el hogar.