En declaraciones a Efe, Borrell recalcó que" nadie puede modificar el statu quo de forma unilateral y menos aún recurriendo a la fuerza", en referencia a las maniobras con fuego real de China como respuesta a la visita a Taiwán de la presidenta de la Cámara de Representantes estadounidense, Nancy Pelosi.
Borrell reconoció que "la tensión crece" en la región mientras tiene lugar estos días en la capital de Camboya la reunión ministerial de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático, en la que el jefe de la diplomacia europea participa como invitado junto a sus homólogos de EE.UU., China, Rusia y otras potencias.
En este sentido, Borrell confirmó que el ministro chino de Exteriores, Wang Yi, no asistió en la noche del jueves a la cena de gala de todos los ministros, en la que estaba previsto que se sentaran al lado, pero mostró buena disposición a mantener un encuentro con él antes de que termine la reunión ministerial.
"Estamos en un momento en que las oportunidades de hablar en persona tienen que aprovecharse. Todo el mundo debe intentar desempeñar un papel de moderación cuando cosas así ocurren", dijo en referencia a la tensión en el estrecho de Taiwán.
El Ejército chino comenzó el jueves sus maniobras militares con fuego real alrededor de Taiwán, que han provocado "un bloqueo marítimo y aéreo" de la isla, según el Ministerio de Defensa de la isla.
Las maniobras incluyen el cierre del espacio marítimo y aéreo en seis zonas alrededor de la isla y han afectado a 18 rutas aéreas internacionales de la isla y más de 900 vuelos se han visto obligados a modificar su ruta.
China insiste en "reunificar" la República Popular con la isla, que se gobierna de manera autónoma desde que los nacionalistas del Kuomintang (KMT) se replegaran allí en 1949 tras perder la guerra civil contra los comunistas y continuaran con el régimen de la República de China, que culminó con la transición a la democracia en la década de 1990.