El ejército de Ucrania negó el viernes haber bombardeado una prisión en la región de Donbás controlada por los separatistas rusos, en la que estaban retenidos soldados ucranianos, como acusó Moscú, que mencionó decenas de muertos.
“Las fuerzas armadas de Ucrania, que adhieren plenamente a los principios y normas del derecho internacional humanitario, nunca han llevado a cabo ni llevan a cabo bombardeos de infraestructuras civiles, especialmente en lugares donde es probable que se encuentren prisioneros de guerra”, dijo el ejército en un comunicado.
Versión rusa
El ministerio ruso de Defensa afirmó en un comunicado que disparos de un sistema de artillería Himars, entregado a Ucrania por Estados Unidos, alcanzaron por la noche una prisión donde estaban encarcelados soldados ucranianos, matando al menos a 40 personas.
El ministerio precisó que la prisión albergaba, entre otros, a miembros del batallón de Azov, una división que ganó notoriedad por su defensa de la ciudad de Mariúpol frente al avance de las tropas rusas y que Moscú afirma que se trata de una formación neonazi.
Moscú afirmó que la “sangrienta provocación del régimen de Kiev” estaba destinada a disuadir a las tropas ucranianas de deponer las armas y rendirse.
“El régimen de Kiev intenta vengarse incluso de sus militares, que se han dado cuenta de la inutilidad de seguir órdenes criminales y se han rendido para tener una oportunidad de redención y una vida pacífica”, señaló el primer representante permanente adjunto de Rusia ante las Naciones Unidas, Dmitri Polianski.
Lea más: Ucrania niega haber bombardeado prisión en Donestk y causado muertos