La utilización de rayos X permitió a la institución descubrir un desconocido retrato de Van Gogh, escondido durante más de 100 años, que ahora se podrá ver en la exhibición “Un poco de Impresionismo” del 30 de julio al 13 de noviembre en la Academia Real Escocesa, en Edimburgo.
Lea más: Diego Ricardo Álvarez presentará sus “Curuvicas”
En la preparación de la exposición fue cuando el organismo descubrió la existencia del autorretrato del famoso pintor neerlandés, cuenta a Efe su máxima responsable de conservación de pinturas, Lesley Stevenson.
Las radiografías suelen encontrar “pinturas anteriores a la principal, pintadas sobre ellas mismas”, explica Stevenson, aunque este caso fue distinto.
“Descubrimos que el autorretrato está oculto” y que el lienzo “está pegado sobre cartón, no es visible”; siendo posterior a su principal creación ‘Cabeza de una campesina’ (1885), comenta la experta.
Entre ambas obras hay “una diferencia de dos años”, revela, ya que la campesina fue creada en 1885 en los Países Bajos.
Los “pequeños lienzos” de Van Gogh
En su traslado a París Van Gogh “llevó pequeños lienzos consigo”, donde comenzó a explorar el retrato durante 1887, y en particular el autorretrato, explica Stevenson.
“No tenía demasiado dinero y su hermano Theo -quien le apoyaba económicamente- estaba fuera de la ciudad”, por lo que “empezó a pintar en la parte posterior” de estos, prosigue.
Ella y su equipo creen que debido a “una exposición en 1905, el cartón fue pegado en la parte posterior, priorizando la mejor, y ya completada, obra”.
Los visitantes serán capaces de poder observar este desconocido autorretrato del artista a través de “una caja de luz diseñada especialmente para ello”, señalan las Galerías.
Varios autorretratos
Con un sombrero y un pañuelo atado al cuello, se puede vislumbrar el rostro del famoso pintor holandés, además de su icónica oreja, en un fondo grisáceo.
“Sabemos que es un patrón, que hay otros autorretratos que tuvieron lugar durante este período de tiempo”, afirma Stevenson, y agrega que al menos se documentan ocho, cinco de ellos en el museo Van Gogh, en Amsterdam.
La institución museística está valorando la extracción de la obra para una mejor apreciación, que necesitará de expertos en conservación tanto de papel como de pintura para desprender el cartón y las capas de pegamento, sin poner en riesgo la ‘Cabeza de una campesina’.
“Seríamos capaces de observar ambas a la vez”, expone la conservadora Stevenson, aunque la “incógnita'' es la condición del propio autorretrato, que ha estado oculto durante más de un siglo”.
Hasta entonces, todo quien lo desee podrá verlo en la Academia Real Escocesa en su exposición de verano ‘Un poco de impresionismo’ del 30 de julio hasta mediados del mes de noviembre, en Edimburgo.