“Las organizaciones criminales han sido capaces con la pandemia de reinventarse, ser más flexibles, más resilientes y buscar nuevas formas de introducción de la droga en los distintos países”, señaló Carlos Villa a Efe.
Explicó que los grupos delictivos impulsaron “su mercado criminal” aprovechando que las fuerzas seguridad de “todos los Estados” centraron su labor en políticas de prevención y apoyo a la ciudadanía a causa del coronavirus.
El funcionario del Gobierno español señaló, tras su ponencia en la reunión del Programa de Cooperación entre América Latina y la Unión Europea en materia de políticas de lucha contra la droga Copolad III desarrollada en Paraguay, que en los años afectados por la covid-19 detectaron más producción, consumo e incautaciones de droga “lo cual es preocupante”.
El titular de Citco agregó que en Europa se registró un incremento de "más de un 15 % las detenciones de narcotraficantes".
Tráfico de drogas<b> </b>es “global”
Por su parte, el director de Copolad III, Javier Sagredo, manifestó que el consumo y tráfico de drogas en Europa se ha mantenido de manera “muy activa”.
Según Sagredo, la pandemia afectó a todos los países en capacidades y vulnerabilidades del contexto social y económico.
El titular de Copolad III puntualizó que tanto la venta como la compra de drogas son un "motor que alimenta" el narcotráfico y que impacta directamente en América Latina "alrededor de espacios donde se producen, donde finalmente se transita" y eso afecta a las políticas públicas y a las comunidades de esta región.
Sobre ese punto, Villa recordó que los países de la Unión Europea están comprometidos con toda Latinoamérica y el Caribe en la lucha contra estos flagelos.
“No me gusta ya hoy en día hablar de países de origen, tránsito y destino”, puntualizó al referir que la lucha contra el tráfico de drogas es “global” y se debe trabajar en conjunto con todas las naciones.
Villa también afirmó que la lucha contra la oferta-demanda de drogas "es compleja" pero que ya lograron resultados como "retenciones de narcotraficantes", desarticulaciones de laboratorios de producción y de grupos criminales.
Copolad es financiado por la Unión Europea, para el impulso de estrategias y políticas sobre drogas en más de 31 países de América Latina y el Caribe.