Detenido el sospechoso de violar a una menor en transporte escolar en Ecuador

(Actualiza con detalles ofrecidos en rueda de prensa sobre la detención) Quito, 3 may (EFE).- El ministro del Interior de Ecuador, Patricio Carrillo, informó este martes de la detención del sospechoso de haber violado a una menor en un transporte escolar, del que era su conductor, el pasado 21 de abril en Quito, caso que ha provocado gran indignación social.

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"Luego de la denuncia de violación a una estudiante del Colegio Dillon en días pasados, la Policía de Ecuador detuvo al acusado de este delito infame que indignó al país", escribió el ministro en su cuenta oficial de Twitter.

Posteriormente, en rueda de prensa, el ministro encomió el trabajo articulado de diferentes instituciones del Gobierno y el Estado que ha permitido la localización del sospechoso de la violación de la menor.

El titular del Interior recordó que "la sociedad ecuatoriana repudió este hecho" y que se respetó el debido proceso de la investigación tras la denuncia, que finalmente ha llevado al arresto del sospechoso.

FUGADO TRAS PRESUNTA VIOLACIÓN

La menor de 15 años fue supuestamente violada por el conductor del transporte escolar que la llevaba a su colegio de Quito, que se dio a la fuga tras dejarla junto a otros estudiantes en el centro.

La Fiscalía ecuatoriana había abierto una investigación sobre este suceso, que habría ocurrido según los primeros indicios, cuando el conductor recogió en primer lugar a la menor y antes de ser trasladada al colegio. Conforme a las sospechas, el conductor pudo haber drogado a su víctima, lo que apuntaría a una premeditación.

El comandante general de la Policía Nacional, Carlos Cabrera, explicó este martes que las diligencias practicadas por la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestro (Dinased) condujeron a la ubicación en la localidad de Lago Agrio, provincia de Sucumbíos (noreste), del sospechoso este martes a las 7:45 hora local (12:45 GMT), en una zona selvática.

El responsable policial identificó al detenido como Darwin Clever J., acusado de la presunta violación de la adolescente en el transporte escolar de una institución educativa fiscal (pública), ocurrida el 21 de abril.

El detenido se había cambiado el color del cabello e iba sin documentos de identidad. Se encontraba huido y la recopilación de información permitió dar con su paradero en Sucumbíos, provincia fronteriza con Colombia.

Cabrera dijo que el detenido no tenía en su poder "elementos identificativos que le habilitan como ciudadano de la República del Ecuador" y que, tras ser sometido a un examen técnico pericial en Criminalística, se pudo determinar que se trataba del presunto autor del delito sexual.

El jefe de la Policía detalló que la violación se habría producido a las 13:00 hora local del jueves 21 de abril y que el sospechoso trasladó a su víctima al centro educativo y se dio a la fuga a las 14:30, "dejando el vehículo en donde transportaba a los estudiante escolares abandonado en las calles Colón y 9 de octubre" de la capital.

SOSPECHOSO SIN ANTECEDENTES

Por su parte, el director nacional de la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia (Dinaf) de la Policía, Julio Antonio Barba, indicó que el detenido "no tenía registros de antecedentes" y que la Fiscalía realiza las diligencias correspondientes para que sea puesto bajo disposición judicial.

La ministra de Educación, María Brown, aseguró que el arresto fue obra de un trabajo conjunto de la Policía Nacional y el Ministerio del Interior, al que se sumó la Gobernación de Sucumbíos. "Desde que se emitió la boleta (orden) de captura (del sospechoso) no han descansado", aseguró.

La víctima y su familia reciben asistencia especializada por parte de la Fiscalía, del Ministerio de Salud Pública, y equipos de psicólogos de Ministerio de Educación en el ámbito psicosocial.

Brown confirmó que la rectora del centro educativo al que acudía la menor violada ha presentado su renuncia y se sigue un proceso administrativo al centro, pese a que la dirección del colegio habría cumplido con los tiempos establecidos para dar la voz de alarma al servicio integrado de seguridad ECU911.

Los progenitores de la menor habían acusado a la escuela de no haber brindado asistencia a su hija durante las cuatro horas que permaneció en las instalaciones educativas hasta que llegaron a recogerla, ni de ayudarles en las investigaciones al no ofrecerles datos del conductor, según informaron medios locales.

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