Algunos contingentes marcharon del Bosque de Chapultepec hasta el Ángel de la Independencia, el principal monumento del Paseo de la Reforma, la avenida más importante de la capital, donde colocaron fichas de mujeres que aún continúan desaparecidas.
Otras centenas protestaron desde el Monumento de la Revolución mientras que decenas más lo hicieron desde la "Antimonumenta" contra la violencia de género en el Hemiciclo a Juárez de la Alameda Central.
Además de colectivos feministas, a la marcha se sumaron ciudadanas como Alba González, quien se dedica a la docencia, para cuestionar el actuar de las autoridades del país.
“Estoy aquí porque creo en el derecho que tenemos a vivir tranquilas, a vivir en paz, la seguridad no debería ser algo por lo que luchamos, la seguridad y la tranquilidad es un derecho que tenemos y en México lo hemos perdido”, comentó González a Efe.
La indignación ha arreciado desde el jueves pasado, cuando las autoridades hallaron el cuerpo de Debanhi en la cisterna de un motel del norteño estado de Nuevo León, cerca de donde la joven desapareció el 9 de abril tras bajar de un taxi, cuyo conductor presuntamente la acosó.
El caso causó indignación nacional e internacional por la imagen de Debanhi abandonada en la carretera que se viralizó y las presuntas fallas de la Fiscalía de Nuevo León, que primero indagó el caso como accidente y este domingo rectificó para investigarlo como feminicidio.
"La policía no me cuida, me cuidan mis amigas", exclamaron este domingo las manifestantes en Ciudad de México.
Aunque el crimen ocurrió en la zona metropolitana de Monterrey, la segunda ciudad más grande del país, las mujeres de la capital se solidarizaron con Debanhi y compartieron historias locales, por lo que llevaron su protesta a la Jefatura General de la Policía de Investigación de la capital.
"Debanhi, hermana, aquí está tu manada", "nos faltan 24 mil" y "alerta nacional", eran otras de las consignas.
“Estas pérdidas han sido muy lamentables y deben parar porque perder a una hija es un dolor indestructible. No hay palabras para describirlo y nadie debería sufrir una pérdida así”, añadió González.
El caso se ha visto como una muestra de la doble crisis de violencia machista y de desapariciones en México, donde asesinan a más de 10 mujeres al día y hay más de 99.000 personas no localizadas desde 1964, según cifras del Gobierno.
En lo que va de año, tan solo el estado de Nuevo León ha registrado una ola de desapariciones con al menos una treintena de mujeres todavía sin localizar.