Las protestas se concentraron en París, pero también en ciudades como Rennes, Lyon, Nantes y Besançon, y hasta en 50 localidades del país, convocadas por sindicatos y organizaciones como SOS Racismo, bajo el lema de "Contra la extrema derecha y por la justicia y la igualdad", así como "Ni un voto para Le Pen".
Unas 22.000 personas participaron en las marchas en toda Francia, 9.200 de ellas en París, según cifras del Ministerio de Interior.
"Más vale un voto que apesta a un voto que mata", se leía en una de las pancartas de la concentración de la capital.
Numerosos manifestantes adelantaban que votarán a Macron, aunque sean contrarios a sus ideas, para evitar que Le Pen sea elegida.
Pero otras pancartas mostraban al mismo tiempo el rechazo de muchos electores a recurrir al llamado "frente republicano", es decir, votar por el candidato contrario a la extrema derecha para impedir su llegada al poder.
"Ni Macron ni Le Pen" era uno de esos eslóganes, en una jornada en la que también hubo en París una protesta anti-Macron, organizada por el ex número dos de Marine Le Pen, Florian Philippot, que aseguraba en redes sociales que se esperaban "un millón de personas". Finalmente, fueron unas cientos de personas.
Este sábado por la noche se cierra la consulta que el partido La Francia Insumisa, del izquierdista Jean-Luc Mélenchon, ha organizado para preguntar a sus simpatizantes cuál debe ser la postura del partido: votar por Macron para evitar a Le Pen o abstenerse o votar en blanco.
Según los últimos sondeos, publicados en la revista "L'Obs" y que dan al candidato liberal la victoria con una diferencia muy ajustada, hasta un 40 % de los votantes de Mélenchon estarían dispuestos a abstenerse o votar en blanco el 24 de abril, un 29 % votaría a Le Pen y un 31 % a Macron.
Mélenchon obtuvo en la primera vuelta más de 7,7 millones de votos, el 22 % del escrutinio, por detrás del 23,1 % de Le Pen y el 27,8 % de Macron.
Al contrario que otros líderes de la izquierda, Mélenchon ha llamado a votar contra Le Pen, pero no ha pedido el voto para Macron.
La ecología ocupó buena parte del discurso mediático este sábado, también en el mitin de Macron, que dedicó su intervención a anunciar políticas que, dijo, multiplicarán las acciones ecologistas del próximo quinquenio.
Frente a él, Le Pen, que ha prometido desmantelar todos los generadores de energía eólica porque "estropean el paisaje", consideró los anuncios de su opositor como una "ecología punitiva" frente a su programa de "ecología nacional", que según varias ONG "hace temer lo peor".
A primera hora de la mañana se registraron además bloqueos en una de las principales arterias de la capital, los grandes bulevares, donde un centenar de militantes del colectivo ecologista Extinction Rebellion iniciaron una acción de tres días bloqueando el tráfico para denunciar "la inacción" de los líderes políticos ante el calentamiento global.