“El presidente de Ucrania pidió a Hungría y al primer ministro (Viktor) Orbán que hagan dos cosas. Primero extender las sanciones al sector energético y que permita el envío de armas a Ucrania. El primer ministro rechazó ambas solicitudes”, informó hoy el portavoz del Gobierno, Zoltán Kovács.
Kovács reiteró que Hungría no quiere involucrarse en la guerra, por lo que no permitirá que se transporte armas letales por el país hacia Ucrania y recalcó que "cerrar los grifos del petróleo y del gas significaría que las familias húngaras pagarían el precio de la guerra".
"Tienes que decidir por ti mismo con quién estás", dijo a Orbán ayer Zelenski, que participó por videoconferencia en la cumbre de los líderes de la Unión Europea (UE), en clara alusión a la buena sintonía del líder húngaro con el presidente ruso, Vladímir Putin.
Zelenski comparó la actual situación de la bombardeada ciudad ucraniana de Mariúpol con la matanzas de judíos en Hungría al final de la Segunda Guerra Mundial.
"Yo he estado en Budapest (...) y vi el memorial 'Zapatos en la orilla del Danubio", en recuerdo de la persecución del grupo fascista húngaro Cruz Flechada contra los judíos, dijo el líder ucraniano.
"Mira esos zapatos. Y verás cómo los asesinatos en masa pueden volver a ocurrir en el mundo de hoy. Y eso es lo que Rusia está haciendo hoy. Los mismos zapatos. En Mariúpol, hay la misma gente", afirmó Zelenski.
"¿(En esta situación) tienes dudas sobre introducir sanciones? ¿Vacilas si dejas pasar o no armas por el país? ¿Tienes dudas sobre comerciar con Rusia o no?" preguntó el presidente ucraniano, dirigiendo sus palabras directamente a Orbán, asegurando que "no hay tiempo para dudar".
El ministro húngaro de Exteriores, Péter Szijjártó, también reaccionó hoy a las palabras de Zelenski, asegurando que entiende que para el presidente ucraniano lo más importante es la seguridad de la gente de Ucrania, pero agregó que para el Gobierno húngaro "lo más importante es la seguridad de los húngaros".
El 85 % de los hogares húngaros usan el gas ruso como calefacción y el 64 % de las importaciones de petróleo de Hungría provienen de Rusia, recordó el Gobierno húngaro, que es uno de los países comunitarios que se opone al corte de suministro de gas ruso como parte de las sanciones contra Rusia.