La ceniza y las inundaciones derivadas de la erupción volcánica y su consecuente tsunami dañaron más de 12.000 explotaciones agrícolas, el 85 % del total que existen en este país, repercutiendo gravemente en su economía y la subsistencia de sus habitantes.
El coordinador regional de la FAO para las islas del pacífico, Xiangjun Yao, explicó que ya se está trabajando "para evaluar cuán grave será el impacto en los agricultores y pescadores de Tonga y en todos aquellos que dependen de la agricultura para su sustento y seguridad alimentaria".
La actividad volcánica también afectó a cerca del 70 % del ganado criado en el país, formado por 169 islas y con 105.000 habitantes, así como las pesqueras que fueron contaminadas por cenizas, escombros y los desechos del tsunami, según las primeras estimaciones de la FAO.
Antes de la erupción del volcán Hunga Tonga Ha'apai, un 23 % de la población de este reino sufría de inseguridad alimentaria, una situación que empeorará debido a este desastre natural y los destrozos que ha provocado.
"Está claro que Tonga requerirá asistencia tanto a corto como a largo plazo", declaró Yao, quien recordó que el 14 % del PIB del país proviene de la agricultura, así como el 65 % de los exportaciones, por lo que su economía se verá desestabilizada en estos sectores también.