La declaración, de carácter simbólico, exhorta a los ministerios del Interior y de Defensa a cumplir con el pronunciamiento e impedir el ingreso de Morales a Perú, país que ha visitado en reiteradas oportunidades desde que asumió la Presidencia el izquierdista Pedro Castillo, con quien guarda amistad.
Una moción similar para declarar a Evo Morales persona non grata fue rechazada por el pleno del Congreso de Perú en agosto pasado, a propuesta de la parlamentaria derechista Norma Yarrow.
Esta vez, el pronunciamiento fue realizado en el marco de la segunda cumbre de Runasur, una reunión de sindicatos, organizaciones sociales y colectivos civiles de Latinoamérica que Morales ha convocado en Cusco (Perú) para el 20 y 21 de diciembre.
El dictamen contó con 9 votos a favor de partidos de derecha como el fujimorista Fuerza Popular, Renovación Popular, Avanza País y de centroderecha como Alianza Para el Progreso (APP).
En contra estuvieron los votos del partido izquierdista Perú Libre, con el que Castillo ganó las elecciones presidenciales y cuyo programa político es similar al Movimiento Al Socialismo (MAS) de Morales, mientras que en abstención votó Acción Popular.
“PERJUICIO” NACIONAL
La comisión parlamentaria que preside el congresista fujimorista Ernesto Bustamante consideró que la presencia de Morales en Perú "es un claro perjuicio para el pueblo peruano, que rechaza la agenda política que pretende imponer".
Asimismo, condenó que Morales promueva en Perú una Asamblea Constituyente y la nacionalización de recursos naturales, dos asuntos que fueron bandera de la campaña electoral de Castillo, a imagen y semejanza del mandato presidencial del exgobernante boliviano.
También censuró las declaraciones de Morales en favor de la "separación de territorios quechuas y aymaras de la nación peruana y de la ampliación de los cultivos de coca", así como contra la cooperación estadounidense contra el narcotráfico.
Durante el debate, la congresista Silvana Robles solicitó que el pronunciamiento no saliera a nombre de toda la comisión parlamentaria, ya que no todos sus miembros estaban de acuerdo con su contenido.
OFICIALISMO VE “DOBLE MORAL”
En ese sentido, Robles acusó a los promotores de esta iniciativa de "doble moral" por no sacar pronunciamientos similares cuando reciben en Perú visitas de la "ultraderecha fascista como es Vox", partido español cuyos representantes visitaron recientemente Perú para sumar adeptos a su manifiesto anticomunista.
Asimismo, su compañero Guillermo Bermejo recordó que "Vox defiende el legado nefasto de la dictadura de Franco y niega el genocidio del imperio español".
El parlamentario de izquierda también recriminó a la oposición haber traído a Perú al líder opositor venezolano Leopoldo López y haber reconocido a "presidentes imaginarios como Juan Guaidó".
"¿Por qué no opinan lo mismo cuando invitan al expresidente colombiano Álvaro Uribe, acusado de violar derechos humanos sistemáticamente, conocido como el padrino de los paramilitares colombianos?", se preguntó Bermejo.
“Me genera vergüenza que salga un pronunciamiento como este. Piensen bien, respiren profundo y, si son democráticos, midamos por la misma vara a todos nuestros visitantes”, concluyó.