“Estamos enfocados. Haremos todo para buscar resolver este asunto lo antes posible. Queremos resolverlo este año. Por supuesto que no es un solo lado quien está en una negociación, hay dos lados”, dijo Guzmán, quien comanda las negociaciones con el Fondo, al que Argentina adeuda unos 43.300 millones de dólares.
El domingo pasado, tras el revés del oficialismo en las elecciones legislativas, el presidente argentino, Alberto Fernández, anunció que en la primera semana de diciembre enviará al Parlamento un proyecto de ley “que explicite el ‘programa económico plurianual”.
Lea más: Argentina negocia "con firmeza con el FMI para recuperar su soberanía
El plan que contendrá “los mejores entendimientos” que su Gobierno haya alcanzado con el FMI en las negociaciones abiertas desde el año pasado.
En declaraciones a la radio Con Vos, Guzmán indicó que el proyecto de ley será remitido al Congreso "una vez que hayamos alcanzado los entendimientos con el staff del FMI".
"Lo que se planea es enviar al Congreso aquello que refleje todos los entendimientos que hayamos alcanzado con el FMI. Primero se negocia con el staff, se busca llegar a un acuerdo y ese acuerdo se someterá a la aprobación del Congreso", explicó.
Guzmán aseguró que este proceso tiene el "respaldo de todo" el frente gobernante, incluyendo a la vicepresidenta argentina, Cristina Fernández, con quien dijo que mantiene un "diálogo fluido y muy valioso".
“No cualquier acuerdo”
La deuda bajo negociación con el FMI procede de un acuerdo "stand by" que el FMI firmó hace tres años con el entonces Gobierno de Mauricio Macri (2015-2019).
De acuerdo con lo pactado hace tres años, el país suramericano debería pagar al FMI, entre capital e intereses, 19.020 millones de dólares el próximo año, 19.270 millones en 2023 y 4.856 millones en 2024, compromisos que el Gobierno de Fernández asegura que su país, con serios desequilibrios macroeconómicos, no está en condiciones de afrontar.
Guzmán insistió en que el nivel de la deuda contraída con el FMI es "un problema muy grave" para Argentina y el país "no tiene hoy la capacidad de hacer frente a los vencimientos, tal como están programados".
“Hace falta un acuerdo, pero no cualquier acuerdo. Un acuerdo como el firmado por el Gobierno anterior sería extremadamente dañino para Argentina. Lo que buscamos es un acuerdo que tenga como base nuestra visión de nuestra política económica”, señaló el ministro, quien dijo que el acuerdo debe contemplar condiciones que aseguren que Argentina pueda continuar por una senda de recuperación económica.
La falta de divisas
Según Guzmán, debe entenderse que lo que "históricamente" ha detenido el crecimiento en Argentina es "la falta de divisas, la llamada restricción externa".
"Ese es el principal escollo a superar. Se debe lograr articular un conjunto de condiciones macroeconómicas, un rol para el Estado desde la política productiva y una articulación de reglas de juegos que favorezcan el desarrollo de los sectores con capacidad de generar divisas", señaló.
Dijo además que, para que el mercado doméstico crezca, “es fundamental que el Estado pueda cumplir su rol apuntalando el crecimiento de la demanda”.