Editado por Desperta Ferro, el volumen comienza con las imágenes de los antecedentes de la Primera Guerra Mundial y termina al final de la Segunda, y que el trabajo de Marina Amaral (Belo Horizonte, 1994) las convierte en contemporáneas al eliminar el blanco y negro.
Como la misma artista brasileña dice en su cuenta de Twitter le encanta "dar vida al pasado".
Autodidacta, antes de colorear las imágenes realiza un cuidadoso trabajo de investigación histórica para saber qué tono aplicar a cada persona o situación que va a colorear.
La artista brasileña ha colaborado con diversos museos, como el Museo Estatal de Auschwitz-Birkenau y el National Memorial for Peace and Justice de Alabama. Los documentales realizados sobre los últimos miembros de la familia imperial rusa #ROMANOVS100 y #1917LIVE, ha tenido diferentes premios y fueron finalistas del Festival Lions Cannes en 2018 y 2019.
Según cuenta ella misma en las redes sociales y su página web, empezó a colorear imágenes en el 2015 cuando descubrió unas fotos de la Primera Guerra Mundial pintadas, y quedó entusiasmada con el resultado.
Aunque la afición le viene de casa, pues su madre es historiadora y se pasó la infancia leyendo libros de historia y viendo documentales de carácter histórico.
Marina Amaral realiza un cuidadoso trabajo de investigación histórica y pide consejo a especialistas e historiadores para ser fiel al más mínimo detalle. Pero también realiza una exhaustiva labor para recrear la luz exacta que debe aparecer en la imagen.
Pero mas allá de la simple reconstrucción histórica de la foto, Marina Amaral proporciona a sus imágenes un sentido narrativo, que ella define como “storycrafting” y que le permite transformar a las figuras individuales y las escenas colectivas en cuadros vivos fieles a su momento, pues no adorna la imagen.
La meticulosidad y el perfeccionismo lo atribuye a su autismo y, según explicó en las redes sociales el pasado julio, le ayuda en su obsesión por el detalle y su entrega total a la tarea que realiza.
En cuanto a los textos del libro son obra del historiador y periodista británico Dan Jones, autor de diferentes programas de Televisión y series de divulgación histórica.
Durante el recorrido visual, dentro del convulso periodo que trata el libro, aparece la Guerra del Rif y la Guerra Civil española. Pero también asistimos en primera línea a la vida de las trincheras durante la Primera Guerra Mundial, conflictos como el irlandés, Oriente Medio, y Asia, entre otros.
Continúa con el comienzo de la Segunda Guerra Mundial, los líderes de los distintos países, la guerra submarina, la batalla de Inglaterra, el gueto de Varsovia, el desembarco de Normandía, la guerra del Pacífico sin que falten las imágenes de los niños, las primeras víctimas de todo conflicto bélico.
Así vemos a Czesława Kwoka, una niña polaca de doce años asesinada en Auschwitz, y Ángeles González, otra niña española de siete años, refugiada de Madrid, y que sujeta con fuerza un trozo de pan duro y unas patatas con gesto hosco.
Retratada en 1938 por la fotógrafa norteamericana Margaret Bourke-White, como se afirma en el texto de presentación de la editorial sobre este libro “podría ser una refugiada siria en 2021 o cualquier víctima de cualquier conflicto”.