En un comunicado, ambas organizaciones acusan a la Policía cubana y las denominadas "brigadas de respuesta rápida" de ser las responsables de los arrestos "arbitrarios" y retenciones de los manifestantes.
La plataforma Cuba Decide y el FDP establecieron desde el pasado fin de semana un "centro de monitoreo" que registró hasta el momento al menos 100 personas detenidas arbitrariamente para impedir que participaran en la manifestación cívica, indica el comunicado.
Según la misma fuente, "algunos arrestos sucedieron con marcada violencia", y cita "el caso de los hermanos Miranda Leiva".
Varios activistas como Zaqueo Báez, José Daniel Ferrer Cantillo, Berta Soler y Ángel Moya ya han sido excarcelados, mientras que otros permanecen aún en paradero desconocido, añade.
Por provincias, la mayor cantidad de detenciones se presentó en La Habana, con 28 arrestos, seguida de Ciego de Ávila (este), con 21. La tercera fue Santiago de Cuba, con 14 detenciones, según un gráfico que acompaña al comunicado y cuyos datos fueron actualizados la tarde de hoy.
La plataforma registró también al menos 131 casos de personas impedidas de salir de sus hogares, en al menos 14 de las 15 provincias del país.
En muchos casos, indica el comunicado, brigadas de respuesta rápida dirigidas por la Policía política realizaron actos de repudio y permanecieron en las puertas de los activistas cerrándoles el paso. En otros, directamente patrullas de la policía les impidieron salir.
"La militarización absoluta de Cuba que estamos viviendo es insostenible para la dictadura. Puede que ayer retrasaran la primavera, pero no podrán detenerla", señaló Rosa María Payá, líder de Cuba Decide, "una iniciativa ciudadana para cambiar el sistema en Cuba hacia la democracia y el estado de derecho", según su web.
"El pueblo cubano está determinado a recuperar la patria y la vida, de ahora en adelante todos los días serán 15 de Noviembre en Cuba", añadió Payá.
Archipiélago, el colectivo disidente cubano que convocó la protesta del 15N, acusó este martes al Gobierno de violar sus derechos fundamentales y propuso prolongar las protestas hasta el 27 de noviembre.
En un comunicado emitido en la madrugada para hacer balance de la jornada previa, argumentó que "las causas que motivaron la convocatoria del 15N siguen vigentes" y que el Gobierno "no ha entendido el mensaje", por lo que apuesta por insistir.
La marcha del 15N, que el Gobierno no autorizó, se vio frustrada por un gran despliegue de fuerzas de seguridad en las principales ciudades, así como acciones individuales contra decenas de activistas, opositores y periodistas independientes.
Algunos fueron detenidos, otros forzados a quedarse en sus domicilios y varios denunciaron mítines de repudio frente a sus casas por parte de grupos de personas afines al Gobierno.
El Ejecutivo cubano, por voz de su canciller Bruno Rodríguez, calificó este lunes la iniciativa de "operación fallida" de Estados Unidos.