De ese total, 81.700 plazas serán temporales y estarán destinadas a cubrir la temporada alta de fin de año, la mayoría de ellas en hoteles, bares y restaurantes, según las proyecciones de la Confederación Nacional del Comercio de Bienes, Servicios y Turismo (CNC), divulgadas este miércoles.
En el primer semestre de este año el turismo brasileño registró pérdidas por 135.800 millones de reales (unos 26.115 millones de dólares).
Aunque el índice todavía permanece un 20,8 % por debajo de los niveles alcanzados antes de la pandemia, se trata del mejor resultado para el turismo desde febrero de 2020, cuando la covid-19 llegó a Brasil.
De acuerdo con la CNC, si esa tendencia permanece, las actividades turísticas generarán 171.900 millones de reales (unos 31 millones de dólares) durante la temporada de fin de año, con lo que se estima que para mayo de 2022 el volumen de ingresos del segmento volverá a los niveles de la prepandemia.
En 2020, cuando el turismo presentó una retracción del 36 % en el volumen de ingresos, 238.680 personas perdieron sus plazas de trabajo, según datos oficiales.
La situación ha mejorado en 2021 con la generación de 167.530 plazas laborales hasta septiembre, la mayoría de ellas creadas a partir de mayo, cuando se empezó a notar el avance de la vacunación contra la covid-19 en el país.
Con más casi 610.000 muertes y 21,9 millones de contagios, Brasil, con sus 213 millones de habitantes, es uno de los tres países más azotados por la pandemia, junto con Estados Unidos e India.
Pese a las elevadas cifras, los promedios de muertes y de casos han caído cerca del 80 %, desde junio pasado, con los avances de la vacunación.
Según el Ministerio de Salud, el 74 % de la población ya recibió la primera dosis de la vacuna y un 58 %, ya cuenta con el esquema completo de inmunización.