El ayuntamiento veneciano informó de la activación de la barrera ante la llegada de una marea alta de 140 centímetros a partir de las 22.00 horas locales (21.00 GMT).
La ciudad de los canales, patrimonio de la Humanidad, se encuentra en medio de una laguna en el norte de Italia separada del mar solo por una larga y delgada manga de tierra, con tres salidas, por lo que en el pasado las mareas altas inundaban su casco urbano.
En noviembre de 2019 Venecia sufrió la inundación más grave desde 1966, al alcanzar los 187 centímetros sobre el nivel del mar (la plaza de San Marco es el punto más bajo, con unos 80 centímetros de altura, por lo que también es el más expuesto a las inundaciones).
De hecho la llegada de una marea de 90 centímetros hizo que ayer el agua volviera a llegar levemente a la plaza de San Marcos, algo agravado por las lluvias y la obstrucción de los desagües.
En octubre de 2020 la ciudad se dotó del sistema MOSE, casi veinte años después del inicio de la obra: se trata de una serie de diques hidráulicos que cierran las tres bocas que unen la laguna veneciana con el mar en caso de mareas superiores a los 110 centímetros.
El objetivo es proteger esta delicada ciudad y sus históricos edificios del agua pero sobre todo del efecto corrosivo de la sal.
Por otro lado en julio el Gobierno italiano evitó que Venecia entrara en la Lista de patrimonio en riesgo de la Unesco después de prohibir la entrada de cruceros en sus aguas, algo por lo que venían combatiendo durante años vecinos y organizaciones ambientalistas.