Tras dos días en los que los líderes de 120 países han puesto sobre la mesa sus posiciones de partida, quedan todavía cerca de dos semanas para que las delegaciones nacionales den forma a los detalles de sus compromisos finales.
"El trabajo no está terminado, todavía queda un largo camino", afirmó Johnson en una rueda de prensa antes de regresar esta noche a Londres.
"Voy a seguir muy de cerca (las negociaciones) para asegurarme de que seguimos avanzando y de que no hay giros inesperados", agregó el jefe de Gobierno británico.
"Mi mensaje para los negociadores es muy sencillo: los líderes del mundo pueden haber abandonado la COP, pero puedo decirles que los ojos del mundo (...) están sobre ellos", declaró.
Johnson destacó que el 90 % de la economía mundial ya avanza "en dirección" a lograr las cero emisiones netas de carbono y ensalzó como uno de los mayores logros de la cumbre hasta ahora el acuerdo para revertir la destrucción de bosques firmado por más de un centenar de países, que representan el 85 % de la masa forestal del planeta.
Preguntado por la falta de nuevos compromisos de China en esta cumbre y por el objetivo de la India de llegar a las cero emisiones en 2070, dos décadas después de la meta que marca la ONU, el mandatario británico aseguró que ambos países han dado pasos en la dirección adecuada.
La India se ha comprometido a que la mitad de su energía provenga de fuentes renovables en 2030 y a reducir las emisiones de carbono en 1.000 millones de toneladas durante esta década, un compromiso de "enorme" importancia para Johnson.
Sobre China, el primer ministro británico dijo que, si bien su presidente, Xi Jinping, no ha acudido a la cumbre debido a la pandemia de coronavirus, su ausencia debe "respetarse".
"Eso no quiere decir que los chinos no estén participando de manera activa. Se han comprometido a las cero emisiones a mitad de este siglo, en 2060 o antes", así como a "alcanzar el pico de emisiones de carbono en 2030 o antes", sostuvo Johnson.
Cuestionado por si cree que el Gobierno de Brasil tomará medidas para proteger los bosques amazónicos, el jefe del Gobierno británico consideró que lo más importante en ese sentido es que grandes compañías de todo el mundo se han comprometido a no invertir en materias primas que fomenten la deforestación.