Seis de los siete jueces del TSE apoyaron la destitución del diputado Fernando Francischini (PSL, derecha) en la Asamblea Legislativa del estado de Paraná, que incluye también su inhabilitación política hasta 2026, y puede sentar precedente para los comicios de 2022.
El motivo de esa medida es que Francischini, un comisario de la Policía Federal que además de candidato a diputado estatal fue uno de los coordinadores de la campaña de 2018 que llevó a Bolsonaro al poder, afirmó en un transmisión en vivo en la primera vuelta de las elecciones que las urnas habían sido manipuladas para impedir la victoria de Bolsonaro.
El conocido como ‘Comisario Francischini’, también exdiputado federal, fue acusado de “uso indebido de los medios de comunicación” y de “abuso de poder político y de autoridad”.
La decisión tiene efecto inmediato, pero el diputado anunció que recurrirá ante el Supremo Tribunal Federal (STF).
El presidente del TSE, el juez Luís Roberto Barroso, afirmó que los comentarios de Francischini “comprometieron el proceso electoral, y, en esa caso específico, examinadas las urnas, se constató que era mentira”.
Poco antes, el plenario del TSE desestimó revocar la candidatura de Bolsonaro y el vicepresidente Hamilton Mourao a las presidenciales de 2018 por un supuesto apoyo ilegal de empresarios que financiaron durante la campaña el bombardeo de mensajes negativos, falsos o no, contra el izquierdista Partido de los Trabajadores (PT) en WhatsApp.
Los jueces consideraron que hubo conductas ilícitas en el uso de las redes, pero no hallaron vínculos con la campaña de Bolsonaro.
Y advirtieron que, de cara a las elecciones de 2022, el uso de “envíos (de mensajes) en masa conteniendo desinformación y mentiras en perjuicio de adversarios puede suponer abuso de poder y uso indebido de los medios de comunicación social” .
Con más 40 millones de seguidores en las redes, Bolsonaro está en el ojo del huracán esta semana después de el pasado jueves citara en Facebook una noticia falsa sobre unos supuestos informes oficiales del gobierno británico relacionando la vacuna anticovid y el sida.
El video fue retirado el lunes de Facebook, Instagram y Youtube, que decidió además suspender el canal de Bolsonaro por una semana. Y el martes, un grupo de senadores pidió al STF y a la Fiscalía suspender el acceso del presidente a sus cuentas de estas tres redes y de Twitter hasta nueva orden.