En el año 2020 ese indicador en América Latina se situó por encima de esa media mundial, dado que la pandemia golpeó en general más a las empresas menos productivas y a los trabajadores peor remunerados, señala la OIT en su nuevo informe sobre los efectos de la COVID en el mercado laboral global.
El informe alerta que la pandemia ha aumentado las diferencias de productividad, hasta el punto de que en 2021 un trabajador de un país de ingresos altos ahora es 18 veces más productivo que uno de ingresos bajos, la mayor diferencia registrada desde 2005.
Frente a los 17,7 dólares de productividad media en Latinoamérica, la de Norteamérica es casi cuatro veces mayor (69,3 dólares), mientras que en Asia Pacífico asciende a 13,1 dólares, en Europa Occidental a 41,6 dólares y en África a 7,2 dólares, de acuerdo con los cálculos de la OIT.