Un centenar de países en desarrollo reclaman desde hace un año el uso de esa cláusula de excepción para poder producir las vacunas contra el coronavirus y afrontar así el problema de la desigual distribución de este producto vital para detener la pandemia.
Wang participó hoy de forma virtual en una sesión de la OMC en Ginebra en la que se analizó el informe sobre la política comercial de China, un ejercicio al que se someten periódicamente todos los Estados miembros de esta institución.
El informe señala que a causa de la pandemia la economía china se contrajo un 6,8% a principios de 2020 y que prácticamente todos los sectores fueron golpeados, con excepción de los servicios financieros y las tecnologías de las comunicaciones, pero la recuperación fue rápida y el año terminó con un crecimiento del 2,3% y se espera que alcance el 6% en 2021 (similar a 2019).
Al relacionar pandemia y comercio, el ministro mencionó que su país ha suministrado más de 1.000 millones de dosis de vacunas a un centenar de países y organizaciones internacionales, y que hará lo posible por entregar el doble de esa cantidad este mismo año.
China desarrolló las vacunas Sinopharm y Sinovac, y tiene una tercera en estudio.
Sobre la excepción a la protección de patentes que se discute en la OMC, Wang aseguró que China apoya que se tomen decisiones en este tema lo antes posible.