Guzmán dijo que “Argentina no puede enfrentar” la carga de deuda en los tiempos del stand-by firmado en 2018 y que el monto de la deuda es “absolutamente incompatible con todo sendero de capacidad de pago de la deuda”.
“Cuando tenés más deuda en dólares significa menos posibilidades de expansión de la capacidad económica y más inflación, cuando faltan los dólares hay menos crecimiento y más inflación”, explicó Guzmán.
“Es muy simple, entonces hay que resolverlo”, resumió.
La forma de resolverlo es buscando “llegar a un acuerdo con el FMI que permita refinanciar todos esos montos, un acuerdo que sea sobre la base de lo que es nuestra visión de cómo administrar la economía y en ese marco se dan las negociaciones”, explicó el ministro.
ENCUENTRO CON GEORGIEVA
Guzmán dio estas definiciones en una entrevista grabada porque esta semana se encuentra en Washington para participar en reuniones multilaterales y continuar avanzando en el proceso de renegociación del programa stand-by firmado con el FMI.
Guzmán mantuvo este martes en Washington una reunión con la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, en la cual también participaron el director por el Cono Sur ante el FMI, Sergio Chodos; la subdirectora del Departamento del Hemisferio Occidental, Julie Kozack, y el jefe de la misión para Argentina, Luis Cubeddu.
El ministro también se reunió con funcionarios del Departamento del Tesoro de Estados Unidos en un encuentro en el que estuvieron presentes el asesor de la secretaria del Tesoro, David Lipton, y el subsecretario de Relaciones Institucionales, Andy Baukol.
Sí DE CRISTINA FERNÁNDEZ A UN ACUERDO
El pasado martes, el presidente argentino, Alberto Fernández, mantuvo un almuerzo en la casa de Gobierno con diferentes empresarios, entre ellos Francisco De Narváez, que también participó en el coloquio de IDEA y que dijo a Radio Mitre que el mandatario les adelantó que su Gobierno "sí" quiere cerrar un acuerdo con el FMI y que "está en proceso de realizarse".
De Narváez también agregó que los empresarios le consultaron al presidente si la vicepresidenta, Cristina Fernández, está de acuerdo en cerrar un acuerdo con el FMI bien y rápido “y la respuesta fue `si`”, lo que “esclarece un panorama de tremenda desconfianza”.
El Ejecutivo de Fernández pretende alcanzar con el FMI un acuerdo de facilidades extendidas, con menores tasas de interés y plazos de pago de como mínimo 10 años, para refinanciar las deudas contraídas con el organismo durante el gobierno de Mauricio Macri (2015-2019), que por la aplicación de intereses y variaciones en el tipo de cambio, ascendía en agosto pasado a 45.455 millones de dólares, de acuerdo a los últimos datos oficiales disponibles.
Argentina que afronta complejos desequilibrios macroeconómicos y carece de acceso a financiación en los mercados internacionales cuenta para hacer frente a los vencimientos de este año con los derechos especiales de giro (DEG) que el propio FMI giró en agosto pasado al país suramericano como parte de una decisión global del organismo para reforzar la liquidez mundial afectada por la pandemia de covid-19.
Pero hacia adelante, el país suramericano debería pagar al organismo, entre capital e intereses, 19.020 millones de dólares el próximo año, 19.270 millones en 2023 y 4.856 millones en 2024.