Entre enero y agosto, las inversiones extranjeras sumaron 36.245 millones de dólares en Brasil, principal destino de ese tipo de inversión en América Latina, lo que representa una subida de un 14,8 % frente al acumulado de los ocho primeros meses de 2020, de acuerdo con un informe de la autoridad monetaria.
Sin embargo, en la comparación con julio, cuando la inversión foránea registró su mejor valor para ese mes en los últimos 8 años, la inversión extranjera directa cayó un 27 %, desde los 6.103 millones de dólares en julio hasta los 4.451 millones en agosto.
Ya en los últimos 12 meses hasta agosto, la inversión extranjera directa acumulada totalizó 49.356 millones de dólares, equivalentes al 3,12 % del producto interior bruto (PIB) brasileño, por abajo de los 56.800 millones de dólares recibidos en los 12 meses hasta agosto de 2020, que correspondían al 3,61 % del PIB.
El Banco Central igualmente informó que Brasil, la mayor economía de Suramérica, acumuló en los ocho primeros meses de este año un déficit de 6.539 millones de dólares en sus transacciones con el exterior, lo que supone una reducción del 49 % frente al acumulado entre enero y agosto de 2020 y el menor valor para el periodo desde 2007.
Solo en agosto, el resultado de las transacciones internacionales, relativas a comercio, rentas y transferencias, tuvo un superávit de 1.684 millones de dólares, mejor resultado para el mes en 15 años e impulsado por el buen desempeño de la balanza comercial, frente a los 950 millones registrados en el mismo periodo del año pasado.
En los últimos 12 meses terminados en agosto, el déficit de Brasil con en sus transacciones corrientes con el exterior alcanzó los 19.505 millones de dólares (1,23 % del PIB), frente a los 35.700 millones (o el 2,26 % del PIB) contabilizados entre julio de 2019 y agosto de 2020.