La recogida de firmas duplica el objetivo mínimo de 500.000 adhesiones dos semanas antes de que deban ser entregadas ante el Tribunal Supremo italiano, prevista para el 8 de octubre, informó hoy la secretaria de la asociación Luca Coscioni a favor de la eutanasia, Filomena Gallo.
"Después de años de batallas legales e inmovilismo político, el referéndum es el único instrumento que tenemos a disposición para conquistar el derecho a decidir de manera autónoma sobre nuestra vida y nuestro cuerpo", escribió Gallo en redes sociales tras lograr lo que considera "un hito increíble".
La asociación Luca Coscioni, que desde hace años lucha por la introducción de una ley que regule la eutanasia, depositó el pasado 20 de abril ante el Tribunal Supremo italiano una petición para poder realizar un referéndum sobre el tema en el país para el que se necesitaban al menos 500.000 firmas a favor.
Hace justo quince años, en septiembre del 2006, Piergiorgio Welby, gravemente enfermo de distrofia muscular, pidió por primera vez al entonces presidente de la República italiana, Giorgio Napolitano, la regularización de la eutanasia.
En Italia existe un vacío legal al respecto, aunque en 2017 se aprobó la ley del testamento vital, que permite a una persona indicar anticipadamente los tratamientos que desea seguir o rechazar en caso de incapacidad.
Además, en 2018 el Tribunal Constitucional instó al Parlamento a legislar en relación a la eutanasia.
Con la petición de un referéndum, la asociación busca que sean “los ciudadanos italianos quienes elijan directamente entre la eutanasia clandestina, que existe, y la eutanasia legal”, una “realidad social muy extendida”.