“Nadie se apropia de lo que le pertenece. La zona señalada, la llamada plataforma continental jurídica, que llega hasta las 200 millas, le pertenece a Chile de pleno derecho desde el principio simplemente porque tenemos la calidad de Estado ribereño”, indicó el canciller chileno, Andrés Allamand.
En una declaración oficial en La Moneda (sede presidencial), Allamand afirmó que "hay una continuidad histórica en la posición y en el planteamiento chileno".
En el año 2009, cuando la Argentina formuló su petición de una medialuna de plataforma continental extendida al sureste del punto F, "Chile señaló que esa pretensión era inoponible e hizo reserva de sus derechos", explicó Allamand.
Lo mismo hizo en 2016, "cuando la Comisión de Límites de la Plataforma Continental de Naciones Unidas se pronunció respecto de esta pretensión argentina", y en 2020, "cuando la Argentina estableció legalmente a través de una ley en su Congreso los límites de la plataforma continental extendida", agregó.
La reacción del canciller chileno se produce tan solo un día después de que su par argentino, Felipe Solá, denunciase que la reciente actualización por parte de Chile de la Carta Náutica N°8, que delimita los límites marítimos, supone "un avance inusitado hacia el Este".
"Esta medida pretende proyectar la plataforma continental al Este del meridiano 67º, lo cual no coincide con el Tratado de Paz y Amistad celebrado entre ambos países en 1984", declaró en un comunicado el ministro transandino.
Ambos Gobiernos, sin embargo, mostraron su disposición a solucionar la controversia mediante el diálogo.
“Chile valora muy positivamente la coincidencia que existe entre ambas Cancillerías en cuanto a que esta diferencia deberá ser resuelta a través del diálogo de acuerdo a la histórica hermandad de nuestros pueblos y el derecho internacional”, concluyó el ministro chileno.