Con Montesinos comienza el desalojo de cárcel con grandes terroristas de Perú

Lima, 25 ago (EFE).- El Gobierno de Perú confirmó este miércoles que Vladimiro Montesinos, quien fuera la mano derecha del expresidente Alberto Fujimori (1990-2000), fue trasladado de prisión tras descubrirse que desde la cárcel donde estaba, custodiada por la Armada, intentase sobornar al Jurado Nacional de Elecciones.

/pf/resources/images/abc-placeholder.png?d=2074

Montesinos, que cumple una condena de 25 años de prisión, fue trasladado de la prisión de máxima seguridad de la Base Naval del Callao a la cárcel de Ancón II, a 39 kilómetros al norte de Lima, resguardada por el Instituto Nacional Penitenciario (Inpe), que depende del Ministerio del Interior.

"Hemos trasladado a Montesinos al penal Ancón II hasta el fin de su condena. En el Gobierno del bicentenario ninguna persona privada de libertad tendrá un trato privilegiado ni se le permitirá burlar la seguridad de los penales para seguir delinquiendo", informó en redes sociales el presidente de Perú, Pedro Castillo.

En la nueva prisión, Montesinos, que debe seguir encarcelado hasta 2026, estará aislado en una celda unipersonal y solo tendrá derechos a dos visitas familiares a la semana y su comunicación con el exterior será epistolar, previa aprobación de las autoridades penitenciarias.

El mandatario recordó así que, recientemente, Montesinos realizó al menos 17 llamadas desde un teléfono fijo de la Base Naval del Callao para sobornar a los magistrados del JNE a cambio de favorecer a Keiko Fujimori en sus denuncias de fraude electoral.

Con ello pretendía apoyar a la hija de Alberto Fujimori en su intento por evitar su tercera derrota electoral en las urnas frente a Castillo.

CERRÓN APUNTA A FUJIMORI

"El traslado de Vladimiro Montesinos a un penal común es una notificación de que las prisiones doradas se acabaron en este Gobierno. Caso Alberto Fujimori debe entrar en evaluación", manifestó el líder del marxista partido de Gobierno Perú Libre, Vladimir Cerrón.

Esto desató la crispación de Keiko Fujimori, que de haber ganado las elecciones había anticipado que indultaría a su padre, quien cumple una condena de 25 años de prisión por delitos de lesa humanidad en una prisión construida exclusivamente para él donde es el único reo y tiene una celda con tres ambientes.

"Rechazo este cruel y vil chantaje político de un personaje que quiere usar a mi padre como rehén. Mover a Alberto Fujimori en su muy delicado estado de salud sería simplemente un homicidio. Denuncio públicamente este perverso juego de Perú Libre en el que no vamos a caer", advirtió Keiko Fujimori en respuesta a Cerrón.

El cambio de prisión de Montesinos también ha desatado el escepticismo de la oposición sobre el futuro de los otros presos de la Base Naval del Callao, entre ellos los terroristas Abimael Guzmán, fundador de la guerrilla maoísta Sendero Luminoso, y Víctor Polay, fundador del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA).

UN CONVENIO POR CUMPLIR

En una comparecencia ante la comisión de Justicia a la que fue citado de manera urgente, el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Aníbal Torres, quien explicó que el Gobierno solo está cumpliendo un convenio suscrito con la Armada en 2019 para desalojar de presos la Base Naval del Callao.

"A los internos del Centro de Reclusión de la Base Naval del Callao se les va a trasladar progresivamente. El Inpe es el ente rector del sistema penitenciario y le corresponde que todas las personas privadas de libertad se encuentren bajo su administración", apuntó Torres.

El ministro explicó que los siete presos de la Base Naval serán realojados en distintas cárceles comunes antes del 9 de enero de 2022 hasta que se construya una nueva prisión especial a cargo del Inpe.

Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...