Las sanciones impiden la entrada en Estados Unidos de Lobo y su familia, explicó en un comunicado el secretario de Estado estadounidense, Anthony Blinken.
"Cuando estuvo en el poder, el presidente Lobo aceptó sobornos de la organización narcotraficante Los Cachiros a cambio de favores políticos. Como primera dama, Rosa Lobo se implicó en actos significativos de corrupción mediante fraude y malversación de fondos públicos para su propio beneficio", aseguró Blinken.
El titular de Exteriores matizó que el expresidente Lobo (2010-2014) "no ha sido condenado todavía" en Honduras y que su esposa "ha sido liberada de prisión y espera un nuevo juicio", que está previsto que comience esta semana.
No obstante, Blinken opinó que los "actos corruptos" de ambos "socavaron la estabilidad de las instituciones democráticas de Honduras", y se comprometió a seguir "combatiendo la corrupción y el desdén del estado de Derecho que coarta el progreso" en el país centroamericano.
Tanto el expresidente Lobo como su esposa aparecieron en la llamada "lista Engel" que el Departamento de Estado publicó el pasado 1 de julio, en cumplimiento de una ley aprobada por el Congreso estadounidense el pasado diciembre.
En esa lista, el Gobierno estadounidense señaló por corrupción a 55 funcionarios y exfuncionarios centroamericanos, entre ellos 14 de El Salvador, 20 de Guatemala y 21 de Honduras.
A quienes aparezcan en esa lista se les negará la entrada a EE.UU. y no podrán obtener visados para viajar a ese país, un veto que confirman las sanciones anunciadas este lunes contra Lobo y su esposa, Según lo establecido en la citada ley estadounidense.
Las restricciones también se aplican a los hijos adultos de Lobo y la ex primera dama, Fabio Porfirio Lobo y Ambar Naydee Lobo Bonilla, así como a su hijo menor, explicó Blinken en su comunicado.