Jorge Ríos, de 23 años, fue secuestrado anoche en la estancia ganadera propiedad de su familia cerca de la localidad de Puentesiño, en el departamento de Concepción, por varias personas que pertenecerían a la Agrupación Campesina Armada (ACA), grupo armado que se consideraba prácticamente desarticulado.
El tío del joven, Carlos Aguilar, hizo la solicitud en una rueda de prensa en Ciudad del Este, segunda urbe de Paraguay y a unos 500 kilómetros de la zona donde se produjo el secuestro.
El portavoz de la familia aclaró que esta no difundió el hecho, una de las condiciones exigidas por los secuestradores, y que las condiciones para su liberación se conocieron al filtrarse la carta que dejaron en el lugar, que fue viralizada en las redes.
En el escrito se exige a la familia el pago de 200.000 dólares con plazo de entrega hasta la tarde de este miércoles bajo amenaza de fusilar al secuestrado.
En ese sentido, el portavoz pidió a los medios que dejen de difundir la carta y a los secuestradores que se pongan en contacto con la familia debido a que han recibido llamadas de personas que se identificaron con los autores del secuestro y a quienes no dan credibilidad.
Al mismo tiempo, pidió una prueba de vida e informó de que el joven requiere de medicación para el asma.
El portavoz agregó que están intentando reunir el monto con la dificultad de que las cuentas de la familia han sido bloqueadas, como procede el Gobierno en casos de secuestro.
Describió que el joven se encontraba en la hacienda Dos Hermanas, a unos siete kilómetros de Puentesiño, cuando fue llevado por la fuerza por unas cuatro personas que irrumpieron en el interior armadas y con ropas de camuflaje.
Horas antes, el ministro del Interior, Arnaldo Giuzzio, reconoció a los medios que "en su momento" las autoridades dieron por eliminado al ACA, pero que "en los últimos tiempos, aparentemente resurgió"
La ACA es una escisión del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), guerrilla que el pasado año secuestró al exvicepresidente Óscar Denis, de quien se desconoce su paradero.
Otra de esas escisiones es el Ejército del Mariscal López (EML), que en octubre de 2016 secuestró al ganadero Félix Urbieta, del que no se tienen noticias desde esa fecha.
Se trata de grupos que se sostienen con secuestros de empresarios agroganaderos y que comparten una orientación marxista desde postulados de la defensa del campesinado pobre de la zona norte del país.
El EPP, fundado en 2008, secuestró en julio de 2014 al policía Edelio Morínigo en el departamento de Concepción, del que tampoco se tienen datos.
Y en septiembre del pasado año secuestró a Denis, de 75 años, en su hacienda ganadera del norte de Paraguay.
La familia del exvicepresidente afirmó haber cumplido entonces la exigencia del EPP para liberar a su padre: el reparto entre comunidades campesinas de alimentos por valor de dos millones de dólares.
La otra exigencia iba dirigida al Gobierno: la excarcelación de dos presos históricos de la guerrilla, que el Ejecutivo descartó como inviable.