Así lo expuso en la vista de extradición que se celebró este martes en la Audiencia Nacional española, en la que McAfee, de nacionalidad británica, declaró por videoconferencia desde la prisión española en la que permanece con carácter provisional desde hace nueve meses tras ser detenido en Barcelona.
El encarcelado, de 75 años, utilizó también el argumento de su edad para suplicar que no accedan a su entrega, ya que considera que, "con toda seguridad", en EE.UU. será condenado a pasar en la cárcel lo que le queda de vida.
Su abogado también defendió la tesis de la persecución política y consideró que Estados Unidos pretende convertirlo en un chivo expiatorio en el mundo del negocio de las criptomonedas, al considerarlas una amenaza para el dólar, mezclando una segunda causa que también tiene abierta su defendido.
McAfee está siendo investigado por evasión de impuestos y en marzo pasado la Fiscalía del sur de Nueva York informó también de su imputación por delitos relacionados con el supuesto fraude por la promoción de criptomonedas a inversores entre 2017 y 2018.
La Fiscalía se mostró conforme a la extradición, pero solo por los tres últimos ejercicios fiscales, ya que en los anteriores la cuota defraudada no alcanza la cantidad para ser delito y descartó la motivación política de la reclamación.
McAfee relató ante el tribunal que todo comenzó cuando, tras vender la compañía que le dio fama mundial, decidió participar en política desde el partido libertario y denunció ante los medios de comunicación la corrupción que había detectado en el IRS (Internal Revenue Service), el equivalente a la Agencia Tributaria española, que en 2018 presentó cargos contra él.
El fiscal, que se negó a que se suspendiera la vista, advirtió a la defensa de que ya está en camino una segunda petición de extradición por manipulación de mercados y blanqueo de capitales, lo que cree que hace "difícil" que se le modifique su situación.
Es una segunda demanda en la que se le acusa de haberse embolsado junto a su asesor "más de trece millones de dólares" a través de "tramas fraudulentas" en internet.