“Pedimos a la CPI que siga adelante en la investigación penal sobre los crímenes de guerra y de lesa humanidad perpetrados por Israel contra el pueblo palestino indefenso”, informó el organismo panárabe en un comunicado con 14 puntos, tras una reunión extraordinaria de ministros de Exteriores.
La liga también destacó la importancia del papel que, basándose en el acuerdo de paz suscrito con Israel en 1994, tiene Jordania como guardián de los lugares sagrados musulmanes y cristianos de Jerusalén Este, ocupada por Israel en 1967, durante la Guerra de los Seis Días.
Por su parte, el ministro de Exteriores jordano, Ayman Safadi, dijo durante un discurso en la sesión que Israel está dirigiendo la zona a “un conflicto”, y subrayó que la paz con Israel “está vinculada a la paz del pueblo palestino”.
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"Israel no disfrutará de paz y seguridad si los palestinos no la disfrutan", recalcó Safadi.
La Liga solicitó a la ONU y el Consejo de Seguridad que proporcionen protección al pueblo palestino y mantengan su derecho a la libertad de oración, en referencia a los últimos acontecimientos en la mezquita de Al Aqsa, tercer lugar más sagrado del islam, coincidiendo con los últimos días del mes sagrado musulmán de Ramadán.
El secretario general de la Liga Árabe, Ahmed Abulgueit, condenó este mañana los ataques aéreos israelíes contra la franja de Gaza, que han dejado más de 20 muertos, entre ellos una decena de menores, y los calificó de “indiscriminados e irresponsables”.
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Ayer la violencia culminó con el lanzamiento de cohetes desde Gaza por parte de las milicias palestinas y los bombardeos israelíes de represalia contra este territorio palestino.
La tensión en la Ciudad Santa ha aumentado en los últimos días, en concreto en el recinto sagrado de la Explanada de la Mezquitas, tras semanas de protestas contra la orden de desahucio de familias palestinas de un barrio de Jerusalén Este ocupado, para entregar sus casas a colonos judíos.