Tras dos semanas de cuarentena, el equipo de la OMS pudo ponerse a investigar en un contexto de tensión, ya que China acusó a Estados Unidos de intentar “politizar” la misión, después que este asegurara que evaluará la “credibilidad del informe”.
Un equipo de la AFP pudo observar a distancia a una decena de miembros de la misión subir a un autobús que esperaba a la salida del hotel. El vehículo se dirigió a un destino desconocido en Wuhan, donde el covid-19 irrumpió a fines de 2019.
La investigación en esta ciudad del centro de China, muy delicada para Pekín que intenta eximirse de toda responsabilidad, llega así más de un año después de la aparición del virus, que ha dejado hasta ahora más de 2,1 millones de muertos en el mundo por más de 100 millones de casos.
El martes se registraron más de 18.000 decesos en el planeta, un récord desde que estalló la pandemia, según un recuento realizado el miércoles por la AFP.
“Preocupante” Brasil
Estados Unidos, con más de 425.000 muertos por 25,4 millones de casos, es el país más enlutado por el covid-19, seguido de Brasil (casi 220.000 decesos), India (unos 154.000) y México (152.000), según un balance de la AFP en base a datos oficiales.
En México, su presidente Andrés Manuel López Obrador, enfermo de covid-19, evolucionaría “positivamente” y el magnate Carlos Slim, el hombre más rico de América Latina, estaría “muy bien”, pese a estar hospitalizado para “monitoreo” por coronavirus.
Brasil sería el país que peor gestionó la pandemia, según un estudio del Institut Lowy publicado en Australia. México y Colombia acompañan al gigante sudamericano en los últimos lugares de esta calificación, que encabeza Nueva Zelanda.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) calificó el miércoles de “preocupante” y “crítica” la incidencia de la pandemia en Brasil, donde se registran “gran cantidad de casos y muertes” en Brasilia, Sao Paulo y Bahía.
Ante esta situación y la aparición de una nueva cepa en el país, Colombia siguió los pasos de Portugal, Turquía, Marruecos y Perú y decidió suspender todos los vuelos con Brasil a partir del viernes, mientras que Alemania prevé reducir su tráfico aéreo con el gigante sudamericano.
“La decisión básica es que no queremos ningún tráfico, ninguna entrada de zonas de mutación en nuestro territorio”, indicó el jueves el ministro de Interior alemán Horst Seehofer.
Pfizer eficaz con dos variantes
En efecto, y mientras los países intentan acelerar la administración de las vacunas, cuyo desarrollo en menos de un año representa un hito científico, la preocupación se centra en estas nuevas cepas del virus aparecidas también en el Reino Unido y Sudáfrica.
La variante británica del coronavirus se hallaba presente en al menos 70 países al 25 de enero, diez más que en el recuento previo del día 19, un avance registrado también por la sudafricana (de 23 a 31) y la brasileña (de 2 a 8), según la OMS.
Pese a las mutaciones, la vacuna de los laboratorios Pfizer y BioNTech conservaría casi toda su eficacia frente a las variantes del Reino Unido y Sudáfrica, por lo que no sería necesaria “una nueva”, indicaron este jueves ambas empresas.
La víspera, la compañía estadounidense Regeneron afirmó que su tratamiento de anticuerpos, que se usó para tratar al expresidente Donald Trump, también sería eficaz contra esas dos variantes, mientras la cepa brasileña, similar a la sudafricana, seguiría bajo estudio.
Tras más de un año de estragos humanos y económicos y de reclusión mundial, las esperanzas siguen depositadas en la vacunación, como lo muestra las tensiones recientes entre la Comisión Europea y el laboratorio AstraZeneca por los retrasos en la entrega de dosis.
En Guatemala, decenas de trabajadores sanitarios exigieron a las autoridades vacunas contra el covid-19, aún sin fecha de llegada, mientras que Bolivia recibirá el jueves su primer lote de 20.000 dosis de la rusa Sputnik V por medio de un avión argentino.
Chile aprobó el miércoles la vacuna contra el covid-19 de AstraZeneca, de la que espera recibir más de 6 millones de dosis, y se convirtió en la tercera autorizada tras la estadounidense Pfizer y la china Sinovac.
La lucha contra la corrupción también se vio golpeada en 2020 por el virus, según Transparencia Internacional (TI), que en su informe anual publicado este jueves expresa su preocupación sobre Venezuela, Estados Unidos y varios países de América Central.
“Muchos gobiernos han aprovechado la situación de pandemia y de emergencia sanitaria para debilitar (...) algunas condiciones fundamentales para la lucha eficiente contra la corrupción”, según Luciana Torchiaro, responsable para América Latina de esta oenegé.