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Este lunes, el diario estadounidense Washington Post publicó un artículo sobre los esfuerzos del Gobierno interino venezolano liderado por el opositor Juan Guaidó de hacerse con bienes y recursos de Venezuela en el extranjero, haciendo énfasis en el accionar de Javier Troconis, un ex ejecutivo petrolero que es comisionado especial del gobierno interino venezolano para la recuperación de activos y ha sido acusado de cometer irregularidades en varios negociados.
Entre esas irregularidades, el Post cita un contrato que Troconis negoció con el Gobierno paraguayo, en nombre de la estatal Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA), que habría acarreado consigo el pago de una comisión de 26 millones de dólares y que, según el diario norteamericano, generó alarma en el equipo legal de Guaidó.
El Post cita dos borradores del contrato, que no fue ejecutado, que indican que el contrato habría perdonado la mitad de la deuda de 269 millones de dólares de Paraguay con PDVSA.
Según José Ignacio Hernández, ex fiscal general de Guaidó, ese contrato fue negociado sin conocimiento o participación de los supervisores de la industria petrolera nombrados por el gobierno opositor venezolano.
Ese contrato habría supuesto un pago de una comisión de 26 millones de dólares al abogado argentino Sebastián Vidal, una cifra que Hernández calificó como “desproporcionada”, según cita el Post.
Troconis, reporta el diario estadounidense, dijo a la Asamblea Nacional (Parlamento, bajo control opositor) de Venezuela que el contrato había sido propuesto por Paraguay –y negó haber contratado a Vidal– , pero el jefe de gabinete del presidente paraguayo Mario Abdo Benítez, Juan Ernesto Villamayor, negó esa aseveración diciendo que Vidal se presentó ante las autoridades paraguayas como representante de PDVSA y pidió una reunión entre altos funcionarios paraguayos y Troconis.
Troconis aseguró al Post que miembros de la oposición venezolana lo pusieron en contacto con Vidal, y rechazó las acusaciones de Hernández de que no tenía autoridad para llevar a cabo las negociaciones, basándose en una carta supuestamente escrita por el propio Juan Guaidó en la que se le autoriza a llevar a cabo las charlas con Paraguay.
El exejecutivo petrolero comentó al Post que decidió dar por terminadas las negociaciones con Paraguay en enero de 2020 porque concluyó que no sería un buen negocio.
Sin embargo, Villamayor dijo al Post que Guaidó solicitó en marzo al Gobierno paraguayo que remita la propuesta de contrato a Hernández para su revisión, y este informó a Paraguay que el contrato no era legalmente válido.
El contrato frustrado con Paraguay es solo uno de varios negociados por los que Tronconis es investigado por las autoridades opositoras de Venezuela.