Tras un estudio en el que ha participado Daniel Quintero Calle, el edil de Medellín (Colombia), este grupo de políticos consideran que los fondos económicos para aportar medidas de estímulo frente a la covid-19 deben sufragar una “recuperación verde” que genere empleo y salve vidas.
Invertir dinero en soluciones climáticas crearía 50 millones de trabajos, evitaría 270.000 muertes prematuras y reportaría 280.000 millones de dólares en beneficios económicos a nivel global, dicen en la nota.
La llamada “Fuerza de Trabajo de Recuperación de la covid-19 del C40 Alcaldes globales” expresa su “profunda preocupación” ante el hecho de que apenas entre un 3 y un 5 % de la cantidad estimada de entre 12 y 15 billones de dólares destinados a la pandemia está ahora comprometido a iniciativas verdes.
“Ignorando la oportunidad de realizar rápidas inversiones de estímulo ecológico, la mayor parte de los gobiernos nacionales y de instituciones globales nos llevarán probablemente hacia un cambio climático catastrófico”, alerta la nota.
En cambio, los ediles dicen que una recuperación “verde y justa” basada en los principios de un Nuevo Acuerdo Verde Global optaría por canalizar fondos de estímulo y recuperación hacia inversiones como infraestructura para bicicletas y energía limpia.
Sostienen que con un planteamiento en esta línea se lograrían beneficios “transformadores” tanto económicos como sanitarios por las 100 ciudades líderes del mundo y sus cadenas de suministro.
Esto situaría además al mundo en el camino para mantener el calentamiento global por debajo de 1,5 grados centígrados.
Enfatizan en su comunicado que una recuperación verde crearía más de 50 millones de empleos “buenos y sostenibles” antes de 2025 por casi 100 ciudades en la red del C40.
También se salvarían vidas reduciendo la contaminación aérea en hasta el 29 % de ciudades del mundo frente a un regreso normal a la actividad; mejoras que podrían evitar, dicen, más de 270.000 muertes prematuras en la próxima década en casi un centenar de urbes y que harían menos probables futuras pandemias por coronavirus al reducir la destrucción del hábitat.
Resaltan que se obtendrían más de 1.400 millones de dólares en costes sanitarios al evitarse ingresos hospitalarios por enfermedades respiratorias y cardiovasculares asociadas con la mala calidad aérea.
También se frenarán más de la mitad de emisiones de gas de efecto invernadero antes de 2030, remarcan.
Los alcaldes creen que la coyuntura temporal es un factor clave y resaltan que una “recuperación verde acelerada” aporta la mejor oportunidad de evitar la crisis climática y de proporcionar más empleos “verdes” y beneficios de salud a largo plazo.
Consideran que el test más significativo en el compromiso de cualquier gobierno con la acción climática ahora mismo es “dónde dirigir los fondos de estímulo para la covid para la recuperación”.
Entre sus exigencias incluyen el final de todas las inversiones de combustible fósil, piden compromisos para lograr una recuperación equitativa e inclusiva, protección para el llamado tránsito de masas, inversiones en energía limpia y ciudades resilientes.
Entre los signatarios figuran también el alcalde de Los Ángeles y presidente del C40, Eric Garcetti, el de Milán, Giuseppe Sala o el de Lisboa, Fernando Medina.