La situación de la epidemia en Hong Kong es notablemente grave”, dijo el vicejefe del ejecutivo Matthew Cheung a la prensa, al anunciar las nuevas medidas que incluyen la prohibición de reuniones en público de más de dos personas y que obliga a los restaurantes a vender únicamente comida para llevar.
Cheung precisó por otra parte que Pekín aceptó ayudar a Hong Kong a construir un hospital de campaña para enfrentar el aumento de casos.
La ex-colonia británica, muy densamente poblada, fue una de las primeras zonas afectadas por la epidemia luego del foco chino e inicialmente registró muy buenos resultados contra el coronavirus.
Pero los contagios volvieron a aumentar hace unas semanas, lo que llevó a las autoridades a ordenar nuevas medidas de distanciamiento social.