En un mensaje publicado en su cuenta de twitter, Shamjaní aseguró que “una venganza más dura está en camino”, por la muerte de Qasem Soleimaní y el vicepresidente de la Multitud Popular, Abu Mahdi al Mohandes, fallecidos el 3 de enero del presente año en un bombardeo selectivo estadounidense en Bagdad.
”Trump admite que el Ejército estadounidense bajo su orden directa cometió el crimen de asesinar a dos figuras brillantes en la lucha contra el terrorismo, el asesinato del general Soleimaní y Abu Mahdi al Mohandes”, agrega Shamjaní.
”Las dos naciones de Irán e Irak son vengadoras de estos mártires y no descansarán hasta que los responsables sean castigados”, tuiteó menos de 24 horas después de su reunión con el nuevo primer ministro iraquí, Mustafa al Kazemi, que llegó este martes a Teherán en visita oficial.
Ayer al Kazemi se reunió con el líder supremo iraní, Ali Jameneí, quien también le recordó el asesinato de Soleimaní e indicó que Washington “admitió explícitamente este crimen, lo que no es poca cosa”.
El líder supremo iraní aseguró que “la República Islámica de Irán nunca olvidará esto y definitivamente devolverá el golpe a los estadounidenses” y expresó que Irán espera que Irak haga el seguimiento de la expulsión de los estadounidenses, ya que “su presencia crea inseguridad”.
El primer ministro iraquí, antes de su visita a Jameneí, se reunió con el presidente iraní, Hasan Rohaní, y reiteró que Irak busca lazos con Irán que se base en la “no interferencia” en sus asuntos internos.
El ataque contra Soleimaní, comandante de la Fuerza Quds de la Guardia Revolucionaria, provocó una escalada de tensión en la región entre Estados Unidos e Irán y, de hecho, en represalia, la Guardia Revolucionaria atacó con misiles la base militar iraquí de Ain al Asad, donde estaban desplegadas tropas estadounidenses.
Después de Irán, Al Kazemí prevé viajar a Washington para abordar la cooperación con su principal aliado occidental.