“Las medidas restrictivas que se han tomado con respecto a áreas de gran importancia para la economía italiana tendrán consecuencias para las actividades económicas vinculadas al transporte, el entretenimiento y la vida social”, advierte este lunes el ministerio de Economía italiano. “Las actividades de producción y la administración pública continuarán operando normalmente”, recalcó el ministerio en su comunicado. Las tres regiones más ricas e industrializadas de Italia son las más afectadas por la epidemia de Covid-19: Lombardía, Véneto y Emilia-Romaña.
Según cifras que datan del 2017 del Instituto Nacional de Estadística (Istat), esas tres regiones, de las veinte de Italia, generaban el 40,1% del Producto Interno Bruto (PIB) y concentraban el 31,5% de la población. Las drásticas medidas tomadas el domingo para detener la epidemia de coronavirus, que ha infectado a más de 7.300 personas y causado 366 muertes, amenazan con causar daños en varios sectores, además del turístico. Han sido limitadas las entradas y salidas de una vasta área del norte, que va de Milán, capital económica, a Venecia, la meca del turismo mundial.
En la región de Lombardía y otras catorce provincias han sido prohibidos todos los eventos culturales, deportivos y religiosos. Las discotecas, pubs, escuelas de baile y otros lugares similares también deben cerrar hasta el 3 de abril.
Riesgo de recesión
“El sector manufacturero no puede permitirse el llamado teletrabajo y sectores claves, como alimentario y farmaceútico, han sufrido consecuencias dramáticas, un infarto económico lo define un banquero” , escribe el diario Il Corriere della Sera. Para evitar la catástrofe, el gobierno está preparando indemnizaciones para los trabajadores y las empresas en todo el territorio nacional y en particular en los sectores y territorios más afectados.
“Las medidas están en fase de definición, serán vigorosas pero proporcionales y limitadas en el tiempo”, explicó el ministerio de Economía. “Nadie tiene una idea precisa de las consecuencias económicas del coronavirus. Mucho dependerá de su duración y de la capacidad del sistema económico para recuperarse después de la crisis”, sostiene Il Sole-24 Ore, el principal diario económico del país.
Para el economista jefe de la OCDE, Laurence Boone, el mejor escenario posible para Italia es lograr un crecimiento cero en 2020, con un primer trimestre negativo, seguido de una lenta recuperación. En 2019 Italia registró un crecimiento de 0,3%, la peor cifra desde 2014, cuando el aumento del Producto Interno Bruto (PIB) había sido cero.
La tercera economía de la zona euro, basada en exportaciones, ya estaba debilitada por la desaceleración europea, especialmente de Alemania y por las tensiones comerciales a nivel mundial y la incertidumbre política interna. Como señal del momento grave la Bolsa de Milán se desplomó este lunes con una caída del 8,82% por el efecto en buena parte de la propagación del coronavirus.