“Donald Trump nos ha puesto en una situación horrible. Tenemos una enorme desigualdad de ingresos” , dijo Biden, prometiendo eliminar las reducciones de impuestos que Trump entregó a los más ricos. “Donald Trump piensa que Wall Street construyó Estados Unidos. La gente común, los estadounidense de clase media, son los que construyeron Estados Unidos , prosiguió el candidato, flanqueado por sus nueve contendientes.
El senador socialista Bernie Sanders, el segundo favorito en la contienda demócrata, se sumó a su competidor al afirmar que Trump es “un mentiroso patológico y un racista y ha mentido al pueblo estadounidense durante su campaña".
“La salud pública es un derecho humano y no algo de lo cual hay que sacar provecho” , insistió Sanders, quien perdió en 2016 la precandidatura frente a Hillary Clinton. Elizabeth Warren, consolidada como precandidata de primer nivel con su discurso anti Wall Street, marcó el tono de la entrega del miércoles de esta contienda, presentada en dos partes por la inusitada cantidad de interesados en llegar a la Casa Blanca en los próximos comicios.
Pete Buttigieg, el alcalde gay de South Bend, Indiana, se dijo favorable a ofrecer cobertura médica a todas las personas, incluso a las 11 millones de indocumentadas. “Nuestro país es más saludable cuando la gente es saludable” , argumentó. "El verdadero problema es que no deberíamos tener a 11 millones de indocumentados sin una vía a la ciudadanía”.
¿Qué harías?
La crisis fronteriza, la detención de niños migrantes en condiciones pésimas y una fotografía impactante de un salvadoreño y su hija ahogados en el Río Bravo provocaron intercambios apasionados el miércoles y el jueves sobre las políticas de inmigración.
La senadora Kamala Harris, la única mujer negra en liza, dijo que lo primero que haría al asumir al gobierno sería devolver a los “dreamers” (jóvenes indocumentados criados en el país) un estatus legal y eliminar los centros de detención para inmigrantes.
De su lado, Biden concordó en que es “indignante” que los niños retenidos carezcan de pasta de dientes, jabón y un cambio de ropa limpia en los refugios para inmigrantes, el mayor de los cuales retiene a casi 3.000 niños a una hora de coche al sur de Miami. “Esto es un problema hemisférico” , dijo también Sanders, promoviendo junto a Biden la perspectiva de abordar el problema de la crisis migratoria en los países donde se origina el éxodo.
En el debate del miércoles, Julián Castro, exsecretario de Vivienda de Barack Obama y quien aspira a convertirse en el primer presidente hispano de Estados Unidos, dijo que lo primero que hará será descriminalizar los cruces de frontera y eliminar la política de “cero tolerancia” de Trump. La senadora centrista y exfiscal Amy Klobuchar también se apresuró a defender a los inmigrantes, diciendo que “ellos son Estados Unidos”.
Castro, O’Rourke y Booker hablaron en español, cortejando abiertamente a un sector de votantes cada vez más influyente. El jueves, el alcalde Buttitieg mostró desde el inicio su conocido multilingüismo con un saludo en español.
“Socialismo corporativo”
Millones de estadounidenses se interiorizaron recién el miércoles de la carrera presidencial que se avecina, a pesar de una fuerte campaña en estados de votación temprana. Lo que escucharon primero fue la promesa de un “gran cambio estructural” de Warren, tercera en los sondeos, y única con dos dígitos entre los candidatos que se enfrentaron la víspera.
“Cuando tienes una economía a la que le va muy bien para aquellos que tienen dinero, pero no tan bien para los demás, eso es corrupción pura y simple” , afirmó. Muchos precandidatos se pronunciaron a favor de que Trump sea sometido a un proceso de juicio político. La semana pasada, un sondeo arrojó que Trump perdería en Florida, un estado clave en las presidenciales.