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Tras una lesión es importante el correcto cuidado de los huesos. Una alimentación balanceada agiliza la salud de la masa ósea afectada.
Una fractura ósea se produce cuando el estrés o impacto separa un hueso. Puede ser una fractura completa, en la que el hueso se rompe a lo largo o una fractura incompleta, en la que el hueso se agrieta, pero no se separa. Cuando se produce una fractura, el cuerpo trabaja para producir nuevas células óseas con el fin de reparar la rotura.
El consumo de cantidades adecuadas de proteínas, calcio, antioxidantes y vitaminas D y K, ayuda a construir y reparar los huesos.
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El calcio es un mineral necesario para la reparación y regeneración de las células óseas. Por su parte, la vitamina K es más conocida por su papel en la prevención de hemorragias. Sin embargo, esta vitamina también mejora la capacidad del cuerpo para absorber y utilizar el calcio de las fuentes alimenticias.
Esto puede ayudar a acelerar la curación de fracturas óseas completas e incompletas. También puede ayudar a fortalecer las células óseas existentes, reduciendo así el riesgo de futuras fracturas en todas las etapas de la vida.
La lisina es un aminoácido necesario para un metabolismo adecuado de las proteínas que participan en la reparación celular. Puede ayudar a reparar las células óseas y puede fortalecer los músculos y ligamentos que rodean los huesos. Este aminoácido también aumenta la absorción de calcio para una reparación ósea mejorada.
La vitamina C es esencial para el uso eficiente de calcio y reparación del hueso. También ayuda a fortalecer los tejidos conectivos y los músculos que sostienen los huesos en su lugar durante la cicatrización.
El consumo de cantidades adecuadas de proteínas, calcio, antioxidantes y vitaminas D y K, ayuda a construir y reparar los huesos.
Alimentos para la salud de la masa ósea
- Leche: Es muy beneficiosa para los huesos, constituye una buena fuente de calcio, vitamina D y proteínas.
- Yogur: Un yogur sin grasa tiene alrededor de 415 mg de calcio. Este alimento, rico en calcio, ayudará a la reconstrucción de huesos. Su consumo es necesario para ayudar a fortalecer el hueso después de una fractura. Los aminoácidos que se encuentran en el yogur, como la lisina y la glutamina, aumentan la absorción de calcio.
- Pescado: El atún, el salmón y las sardinas son buenos para aumentar la curación del hueso. Estos tres pescados son ricos en vitamina D, responsable de la absorción de calcio. Lo mejor es combinar la ingesta de vitamina D con la de calcio para tener los mejores resultados.
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- Brócoli: Está lleno de vitamina C y vitamina K. La vitamina K es necesaria para fijar el calcio a los huesos. La vitamina K se une con otros minerales para ayudar a formar la masa ósea, también ayuda a acelerar la curación de un hueso roto, ya que está involucrada en el proceso de mineralización de los huesos.
- Cereales: La quínoa y el arroz integral contienen calcio, magnesio y fósforo. Además, la cebada, el trigo y el centeno contienen dosis de vitamina A, beneficiosa para la absorción de calcio.
- Verduras verdes: Las frutas y verduras son ricas en antioxidantes y ayudan al cuerpo a combatir los radicales libres que retrasan la curación de los huesos. Una porción de estas verduras al día es suficiente para satisfacer las necesidades de vitamina K.
- Nueces y semillas: Almendras, avellanas, semillas de girasol, semillas de sésamo y pistachos son ricos en calcio, magnesio y fósforo. Los frutos secos y las semillas también pueden proporcionar dosis de vitaminas A y C.
- Naranja: Beber jugo de naranja puede acelerar el proceso de curación de los huesos. Esta fruta contiene vitamina C, un antioxidante importante que sintetiza correctamente el colágeno y ayuda a la curación. La vitamina C, actúa como un agente antiinflamatorio, reduce el dolor y fomenta el crecimiento de masa ósea.
adanei@abc.com.py