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La tabla de picar es un utensilio esencial en toda cocina, ya que se trata de la superficie necesaria para cortar de forma segura los ingredientes que usamos en la preparación de nuestros alimentos y, algunas veces, incluso, nos sirve para la presentación final de nuestros platos. Todas las cocinas tienen, al menos, una tabla de cortar; también, en algunas cocinas, tienen cuatro o cinco de ellas. ¿Cómo elegirlas?, ¿en qué se diferencian los distintos materiales?, ¿cómo deben cuidarse?
Cuando se habla de utensilios básicos en la cocina, todos piensan en cuchillos, cacerolas, sartenes, espátulas, platos, y hasta tazas y cucharas medidoras. Pero son pocos los que piensan en un utensilio que, idealmente, dura muchos años y que, además, tiene un impacto importante en nuestra seguridad mientras cocinamos: la tabla de cortar.
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Por qué son importantes las tablas para cortar
Y resaltamos lo de cortar, porque no es lo mismo una tabla de presentación o servicio, que la que usaremos para trabajar con los alimentos. Últimamente parece que solo importan las tablas bonitas que lucen bien en la mesa o en fotos, cuando son las de trabajo las que más nos van a ayudar en la cocina.
Prácticamente, cualquier receta requiere manipular algunos ingredientes y disponer de una buena tabla de corte es fundamental. Permite trabajar correctamente los productos con comodidad, facilita la organización, el orden y, también, la seguridad.
Si los cuchillos son una herramienta clave, también lo es la tabla sobre los que vamos a usarlos, para no estropearlos. No conseguiremos buenos cortes si la superficie se mueve, es inestable, demasiado dura o demasiado blanda. Debe tener el tamaño adecuado y estar bien limpia, libre de olores extraños, y a salvo de bacterias o de la contaminación cruzada.
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Sobre una tabla podemos cortar, picar, trocear, pelar y laminar, y, también, preparar ingredientes con las manos u otros utensilios de cocina. Lo ideal es tener al menos dos: una para vegetales y otra para carne y pescados. El cuidado debe ser aún mayor si tenemos en casa celiacos, intolerantes o alérgicos a algunos alimentos, que tienen recomendaciones específicas.
Tradicionalmente, las tablas de cortar siempre han sido de madera; sin embargo, en los últimos años es fácil encontrar tablas fabricadas de otros materiales. Hay una gran variedad, de diferentes materiales, tamaños, colores y precios. Y cuando hay más opciones, ocurre que cuando buscamos hacernos con una tabla de cortar nueva, no sabemos con seguridad cuál elegir, pues la mayoría de las veces desconocemos sus ventajas y desventajas. Por eso, hoy vamos a compartir algunos consejos para seleccionar una tabla de cortar para nuestra cocina.
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La principal discusión a lo largo de los años sobre este tema es qué tipo de superficie o material es más seguro o tiene menos probabilidades de convertirse en un caldo de cultivo para las bacterias. Debemos recordar que las tablas de cortar si no se utilizan y limpian adecuadamente, pueden convertirse en un vehículo de rápida contaminación de los alimentos.
Ventajas y desventajas de las tablas de cortar de plástico
Las tablas sintéticas pueden ser también muy válidas si se eligen bien. Las hay básicas muy baratas, pero que se estropean con facilidad, así que mejor invertir en una buena marca que ofrezca garantías a largo plazo. Las sintéticas de polipropileno y reforzadas se desgastan menos, no acumulan olores y son más seguras. Entre sus ventajas destaca que suelen ser más baratas, más ligeras y se pueden introducir en el lavavajillas. Además, son las preferidas de quienes buscan diseños más modernos y actuales.
Por lo regular, las tablas de cortar fabricadas en plástico son las más económicas y podemos encontrarlas en varios colores, de varios grosores e incluso las hay duras o flexibles. Las ventajas de las flexibles son dos: facilitan el paso de los alimentos hacia otros recipientes y son muy fáciles de almacenar.
Sin embargo, no durarán tanto como las que son más gruesas, pues los cuchillos muy afilados pueden fácilmente atravesar el delgado material. Por el contrario, las duras, son mucho más durables.
Generalmente, las tablas de cortar fabricadas en plástico son consideradas más seguras, pues son más fáciles de limpiar y desinfectar.
Cuál es la tabla de limpiar más higiénica
Las tablas de cristal templado son seguramente las más modernas y las más caras, pues están diseñadas para adaptarse también a la decoración de nuestra cocina. Este tipo de tablas son muy duraderas, más resistentes al calor, y hay que tener en cuenta que son las más higiénicas y fáciles de limpiar.
Pero también tienen sus desventajas, pues son muy duras con los bordes de nuestros cuchillos, lo que implica que tengamos que afilarlos más seguido. Debemos considerar también que el sonido que se produce al cortar es bastante fuerte y puede no resultar agradable. Son mucho más pesadas que los otros tipos, pero son ideales para proteger nuestras superficies de cocina de las ollas calientes.
Ventajas y desventajas de las tablas de cortar de madera
Para la fabricación de tablas de cortar, actualmente se utilizan diversos tipos de madera, y recientemente las fabricadas en bambú se han vuelto muy populares, debido a su dureza y resistencia a las bacterias. La principal ventaja de las tablas de cortar de madera es que son más suaves con los bordes de nuestros cuchillos.
Es cierto que muchos las prefieren por el aire rústico que le brinda a una cocina, sin embargo, su desventaja es bien conocida por la mayoría: son más difíciles de limpiar, pero además, los cortes y las grietas causadas por los cuchillos pueden albergar bacterias, por lo que deben desinfectarse a fondo.
Por otro lado, hay que tener en cuenta que el deterioro que sufre la madera provoca cortes y hendiduras en las que pueden acumularse restos de comida y bacterias. Hay que considerar desechar aquellas que tengan muchas marcas de cuchillo, para reducir los riesgos de contaminación cruzada en los alimentos.
Cómo mantener limpias las tablas de cortar
Existen otros materiales, como la piedra, pizarra, granito, cristal o mármol, pero son más adecuados para servir y presentar que para usar diariamente en la cocina. Sea cual sea la tabla de cocina que escojamos, es importante tener en cuenta algunos cuidados básicos para conservarlas en perfecto estado durante más tiempo. Primero debemos manipularlas correctamente, lejos de fuentes de calor, evitando los golpes, los cortes muy bruscos y no colocar cosas muy pesadas encima.
Las tablas de cortar se utilizan para todo tipo de alimentos, sean crudos o cocinados. Existe pues un riesgo importante de contaminación cruzada si no se toman las siguientes precauciones:
1. Limpiar las tablas entre usos y aplicar un desinfectante para reducir la carga de microbios que pueda acumularse.
2. Si se encuentran muy deterioradas, es mejor cambiarlas o bien, llevarlas a algún establecimiento donde puedan pulir la superficie y dejarlas lisas de nuevo.
3. Las mejores tablas para cortar alimentos crudos deben ser de materiales plásticos, no de madera.
4. Utilizar tablas de distintos colores para los distintos grupos de alimentos. Es la medida preventiva por excelencia, ya que limita el riesgo de contaminación cruzada al separar el uso de las tablas por grupos de alimentos. Por ejemplo, una buena clasificación sería: vegetales crudos, carnes crudas, pescados crudos y alimentos cocinados.
Tabla de corte blanca: pastas, quesos, pan, bollería.
Tabla de corte verde: frutas y verduras.
Tabla de corte amarilla: carnes blancas (pollo, pavo, gallina).
Tabla de corte azul: pescados y mariscos.
Tabla de corte roja: carnes rojas (ternera, cerdo, cordero y otras).
Tabla de corte marrón: carnes cocinadas y fiambres.
Más consejos para la limpieza y desinfección
Si la limpieza y desinfección de las tablas no son adecuadas, hay riesgo de crecimiento de bacterias en su superficie y en las grietas provocadas por los cuchillos. Es importante seguir las siguientes recomendaciones:
Limpiar las tablas con detergente, agua caliente, esponja o cepillo, para arrancar y arrastrar los posibles restos de alimentos.
Si se dispone de lavaplatos, introducirlas una vez arrancada la suciedad para que la desinfección sea mecanizada y alcance temperaturas elevadas que ayudarán a eliminar microorganismos y quitar restos de grasa. Si no se dispone de lavaplatos, habrá que desinfectar con ayuda de productos químicos específicos de uso alimentario y enjuagar bien para eliminar los restos.
Dejar secar colocadas en vertical, para que escurran los restos de agua.
Mantener las tablas de corte limpias en posición vertical, preferiblemente al aire. En los cajones y armarios podrían acumular humedad, que no solo las estropea, también puede ser foco de bacterias y malos olores.
Para eliminar posibles olores, podemos lavarlas de vez en cuando con jugo de limón y sal, y las de madera requieren aplicar una capa de aceite cada cierto tiempo.