Lo nuevo en vestidos de novia

Antes del gran momento de decir "sí, quiero" hay millones de preparativos. Elegir el lugar de festejo, la comida, las invitaciones, decidir si habrá flores o no... pero el punto en el que más se demora toda novia es el vestido. Aquí algunas tendencias.

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Algunas saben de inmediato cómo quieren que sea, otras buscan, prueban, retocan y miran cientos de revistas hasta encontrar el modelo que las haga felices.

Existen mil opciones y propuestas, sobre todo teniendo en cuenta que "los vestidos ahora son mucho más individuales", observa Sonja Schulz, que trabaja para la revista especializada Hochzeitsportal24. De todos modos, más allá de los gustos indivuduales, hay algunas tendencias bien marcadas:

TENDENCIA 1: Los diseños más pedidos para las bodas son los que remiten al estilo princesa, sirena y hippie. El look hippie, que también se llama Boho, se vio mucho en 2017. Es bastante sexy. Lleva poco y nada de forro, es de telas livianas que le dan un estilo muy etéreo y lleva mucho encaje y lentejuelas.

El modelo sirena es totalmente distinto. Realza las curvas femeninas porque va al cuerpo hasta por debajo de las nalgas o incluso hasta las rodillas. "En 2018 se verá mucho con filigranas de encaje, desde el escote hasta el dobladillo", dice Schulz.

También están de vuelta los vestidos pomposos tipo princesa, que "tienen colas largas, corsets hermosísimos trabajados en encaje, escotes en forma de V o de corazón y faldas de tul muy armadas a partir de la cintura", explica Susan Lippe-Bernard, redactora de otra revista especializada en novias. Estos modelos suelen tener bastante volados que remiten a las faldas de los años 20. El efecto se logra con un diseño muy simétrico en varias capas que se van superponiendo para lograr un efecto de falda voluminosa.

TENDENCIA 2: Puedes elegir el corte que quieras, pero hay algo que se ve en todos los diseños: el encaje. Algunos modelos lo integran de una forma, otros de otra, y eso es lo que hace la diferencia de estilos, ya sea cándido y romántico o tronante y seductor. También se puede optar por un vestido hecho totalmente en encaje. La última capa, la más superficial, suele ser un tul trabajado.

El encaje puede ser más o menos filigranado. "El encaje crochet suele utilizarse más en el estilo Boho", comenta Lippe-Bernard.

También se puede aplicar con un "efecto tatuaje", es decir, sobre un tul muy fijo y transparente como para que parezca que el aplique está directamente sobre la piel. Se ve mucho en el escote, la espalda y las mangas.

TENDENCIA 3: En los últimos años prácticamente no se vieron novias que lucieran vestidos de manga larga, "pero ahora muchos diseñadores han sumado modelos en los que ese efecto tatuaje se expande desde el pecho hacia los brazos. Esa continuidad de transparencia y de piel que se deja entrever queda muy femenina y sensual", comenta Lippe-Bernard. Las mangas pueden ser totalmente ajustadas, hasta la muñeca, o ir ajustsadas hasta el codo y terminar luego en forma trompeta.

TENDENCIA 4: El escote en la espalda. Las espaldas escotadas se verán muchísimo en este 2018. "Se verá tanto como los escotes tradicionales en la parte frente", asegura Lippe-Bernard. La espalda descubierta se combina con el modelo princesa, el sirena y el Boho, a veces incluyendo encaje sobre tul.

Se verá mucho el corte que deja parte central de la espalda al descubierto y cierra arriba, con un detalle, a la altura de la nuca.

TENDENCIA 5: El color clásico es el blanco, no hay modo de negarlo. Sigue siendo el tono más solicitado por todas las novias. Sin embargo, en muchas casas se ofrecen vestidos en otros colores, como el azul marfil o el rosa pastel. Lo nuevo es el look "ombre", que lleva una falda de varias capas de tul. Las capas que se colocan por debajo de la superficie tienen tonos cappuccino y las superiores son cada vez más claras.

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