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El Alzhéimer es una enfermedad neurodegenerativa que presenta desafíos únicos tanto para las personas afectadas como para sus cuidadores.
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Se trata de una forma común de demencia que afecta la memoria, el pensamiento y el comportamiento. La enfermedad progresa en etapas, desde los primeros síntomas como olvidos leves, hasta etapas avanzadas donde el paciente puede necesitar cuidado constante.
Conocer sus características puede ayudarte a anticipar y adaptarte a las necesidades del paciente.
Crear un entorno seguro para las personas con Alzhéimer
La seguridad es una prioridad cuando cuidás a alguien con Alzhéimer en casa. Lo primero será eliminar peligros físicos. Para esto retirá alfombras sueltas, asegurá cables eléctricos y bloqueá el acceso a escaleras si es necesario.
Instalá alarmas o sistemas de monitoreo para evitar que el paciente se pierda si intenta salir de casa.
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Por otro lado, etiquetar cajones y armarios puede ayudar a la orientación. Además, usar señales claras para baños y otras habitaciones puede ser útil.
Los pacientes con Alzhéimer responden bien a la consistencia y una rutina diaria proporciona estructura y reduce la ansiedad.
Incluí actividades físicas y mentales, como caminatas cortas, juegos de memoria o manualidades, dependiendo del nivel de habilidad del paciente, y establecé horarios fijos para las comidas, baño y descanso.
La enfermedad puede dificultar la capacidad de comunicación, pero hay maneras de mejorar el intercambio diario. En primer lugar deberás suavizar la voz y mantener el contacto visual. Esto puede hacer que el paciente se sienta apoyado.
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Sé siempre claro y sencillo en tu comunicación. Utilizá frases cortas y palabras simples. A veces, los gestos y expresiones faciales dicen más que las palabras.
Muchas veces es común que ocurran comportamientos desafiantes, como agitación o confusión. Problemas como el dolor o el entorno pueden inducir comportamientos difíciles, pero identificarlos puede ayudar a abordarlos efectivamente.
Reducir el ruido y las distracciones del entorno puede calmar al paciente. También podés intentar llamar la atención del paciente hacia actividades o temas más agradables.
Cuidado del cuidador
El cuidado de un ser querido con Alzhéimer puede ser emocional y físicamente agotador. El bienestar del cuidador es vital y para ello habrá que buscar apoyo.
Los grupos de apoyo son una excelente forma de compartir experiencias y obtener orientación, pero también deberás asegurarte de tener tiempo para vos mismo, ya que esto puede evitar el agotamiento.
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No olvides acudir a chequeos médicos regulares y mantener una dieta equilibrada.
Recordá que enfrentar el Alzhéimer es un esfuerzo de equipo. Existen numerosos recursos disponibles que pueden ser útiles, como organizaciones de Alzhéimer que ofrecen información, asesoramiento y servicios de apoyo.
También existen servicios comunitarios, desde cuidado en el hogar hasta transporte para citas.
Cuidar a un familiar con Alzhéimer en casa no es una tarea fácil, pero con preparación y el uso de estos consejos, es posible proporcionar un entorno seguro y amoroso.