Nacido en Nápoles (Italia) hace 71 años, criado en Argentina, exiliado en tierras colombianas durante la dictadura militar argentina y con residencia actual a caballo entre Colombia y España, el psicólogo y escritor Walter Riso considera que sigue habiendo “demasiado dolor por amor”.
“El reino del amor es el que más sangre ha derramado en la Historia”, agrega en una entrevista con EFE este escritor que ha vendido decenas de miles de libros y dado conferencias por Europa, América Latina y EE.UU., una de las cuales se titula “Principios para no morir de amor”.
Entre un 60 % y 70 % de las consultas con psicólogos o terapeutas cognitivos, como Riso se define, son por razones que tienen que ver con el amor y eso es así en todo el mundo, dice.
“Ya te dije adiós, ahora cómo te olvido” es el nuevo título de este exitoso y prolífico autor, cuya única novela, “Pizzería Vesubio”, basada en su historia familiar de emigrantes italianos en Argentina, va a llevarse al cine, según adelanta a EFE.
El nuevo libro está escrito para los que son abandonados por sus parejas con el fin de que puedan “sacarse a su ex de la cabeza y el corazón” y liberarse de la “dependencia afectiva”, afirma.
Autoayuda de dos clases
Cuando se le pregunta por el cierto menosprecio con que los literatos y otros tratan a los autores de libros como los suyos, responde que la suya es autoayuda “científica”, pero dice que hay otra “plagada de lugares comunes” y hecha por “vendedores de humo”.
Hace 30 años trabaja como psicólogo clínico y formador de terapeutas, práctica que alterna con el ejercicio de la cátedra universitaria en Latinoamérica y España y la publicación de textos científicos y de divulgación en diversos medios y ahora también en las plataformas sociales.
El duelo por un ser amado fallecido y el que se hace porque el que nos dejó por otra persona o simplemente porque no quería estar más a nuestro lado son distintos, precisa.
La diferencia es que en el segundo caso aparece “la maldita esperanza” de recuperar a quien perdimos, subraya este especialista en Bioética.
En el libro hay un capítulo dedicado a los que, en lugar de ser realistas y preservar su dignidad, se obsesionan con la “reconquista” de la expareja y se ponen a seguir sus huellas desesperadamente mediante amigos o familiares, con brujos y adivinos o de una manera más actual revisando exhaustivamente las redes.
Tentaciones clásicas como organizar encuentros “fortuitos”, tratar de devolverle a él o a ella objetos “personales” o pedirle ayuda en alguna materia son desaconsejados en este libro.
Riso también da consejos para tomar el control de la propia vida una vez liberado de la dependencia e incluso para intentar una nueva relación, porque "el corazón no se jubila".
Dependencias de afecto y sexo
Según Riso, 20 % de la población mundial es dependiente afectivamente y las mujeres lo son más que los hombres, no por razones genéticas o biológicas sino "puramente culturales", pero cuando se habla de dependencia sexual son ellos los campeones.
De esta manera, dice, si las mujeres fuesen menos dependientes afectivamente y los hombres menos dependientes sexualmente, se lograría “una relación recíproca, una relación más democrática”, lo que Riso llama “el buen amor”.
A una pregunta de EFE responde que, entre heterosexuales, duele más que tu pareja te deje por una persona de su mismo sexo y lo más doloroso y menos comprensible y aceptable es cuando no hay un tercero sino que toma la decisión porque lo ha pensado mejor, tiene dudas, está deprimido o en crisis existencial.
"No hay una explicación y eso genera un problema más complejo", subraya Riso, quien estima que un 85 % de las rupturas sentimentales son por causas externas y el 15 %, internas.
A la hora de romper una relación, las mujeres son más valientes que los hombres y también son más inteligentes emocionalmente, de acuerdo con Riso, cuyo primer libro, publicado hace 30 años, se tituló “Enamórate de ti”.
Aunque Riso fue criado en Argentina, donde el psicoanálisis está fuertemente implantado, esta disciplina no es de su agrado, entre otras razones porque la efectividad en la cura es "dudosa" y porque se "quedó en la época victoriana" y es "reaccionario y machista".
Como "profesional de la salud" defiende una combinación de psicología y filosofía y apunta, más que al alivio, a la cura, aunque duela. "El cambio genera sufrimiento", dice.
Riso confiesa que nunca en su vida ha ido a un psicólogo. Lo más parecido son sus visitas a un campesino que vive en un cerro de los alrededores de Medellín (Colombia) con quien habla de sus cuitas con una botella de aguardiente sobre la mesa, dice.