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A cerca de este trastorno mental llamado cleptomanía, el Prof. Dr. Julio Torales, médico psiquiatra y jefe del Departamento de Salud Mental del Hospital de Clínicas, Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de Asunción, habla de los síntomas de la cleptomanía y que no existe ningún medicamento específico para el tratamiento. de esta afección.
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Los síntomas de la cleptomanía pueden incluir:
- Incapacidad para resistir los poderosos impulsos de robar artículos que no se necesitan.
- Sentir un aumento de la tensión, la ansiedad o la excitación que precede al robo.
- Sentir placer, alivio o gratificación mientras se roba.
- Sentir un terrible sentimiento de culpa, remordimiento, autodesprecio, vergüenza o miedo a ser detenido después del robo.
- Retorno de los impulsos y repetición del ciclo de cleptomanía.
“Muchas personas con cleptomanía viven una vida de vergüenza secreta porque tienen miedo de buscar tratamiento de salud mental.”, señala el psiquiatra Julio Torales.
Según el profesor y médico de la UNA, que la información actualizada sobre el aspecto epidemiológico informa que la frecuencia de la cleptomanía en la población general está entre el 0,3 y el 0,6%, siendo la relación de sexo de 3:1 (más común en mujeres).
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“Distinguir entre la cleptomanía y el robo común es a menudo una tarea difícil. El uso de la “Entrevista Clínica Estructurada para la Cleptomanía” reporta una alta sensibilidad y especificidad y su uso puede ayudar al médico psiquiatra a llegar a un diagnóstico preciso. La cleptomanía es un trastorno poco frecuente, que debe diferenciarse por comportamientos comparativamente comunes. Además, los pacientes con cleptomanía no roban para obtener un beneficio personal, sino que buscan un alivio sintomático, y el comportamiento se considera marcadamente egodistónico (que genera sufrimiento en el paciente).” manifiesta el profesional de salud mental.
Los individuos con cleptomanía tienen altos índices de comorbilidad con el trastorno bipolar y depresión unipolar.
“Una recopilación detallada de la historia de los eventos de robo y su relación con los estados de ánimo puede ser extremadamente útil para reconocer los trastornos del estado de ánimo comórbidos. La cleptomanía también puede superponerse con el trastorno obsesivo-compulsivo, trastornos por uso de sustancias y trastornos de la personalidad.”
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Y dice que “Un reto importante que deben abordarlos médicos psiquiatras es el estigma relacionado (incluido el autoestigma). La vergüenza relacionada con este comportamiento puede inducir a los pacientes a evitar la búsqueda de ayuda. La falta de formación adecuada entre los médicos y los prejuicios personales a la hora de evaluar a los individuos implicados en actividades ilegales también pueden conducir a diagnósticos erróneos.”, señala el jefe del Departamento de Salud Mental del Hospital de Clínicas.
No existe ningún medicamento específico
“No existe ningún medicamento específico para el tratamiento de esta afección, por lo que el uso de cualquier fármaco en el tratamiento de la cleptomanía debe considerarse “fuera de etiqueta”. Se han realizado algunos estudios de etiqueta abierta y estudios doble ciego con control de placebo para el tratamiento farmacológico pero los resultados no son concluyentes y la mayoría de las evidencias son anecdóticas. El uso de antidepresivos, anticonvulsivos y ansiolíticos (o combinaciones de estos fármacos) se ha comunicado en estudios de series de casos o informes de casos con diversos grados de éxito. Además, un estudio abierto y un estudio doble ciego controlado con placebo mostraron una reducción significativa de la intensidad de los impulsos de robar, de los pensamientos sobre el robo y de la conducta de robo con el uso de naltrexona.”, comentó Torales.
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“Se han probado la psicoterapia orientada a la introspección y la terapia conductual en el tratamiento de estos pacientes. Sin embargo, hay muy poca evidencia para guiar la selección de un enfoque sobre otro en el tratamiento de este trastorno.”
“La cleptomanía es un trastorno incapacitante del control de los impulsos, y los pacientes que sufren este trastorno necesitan un enfoque diagnóstico oportuno y mejores normas de atención. Un mayor conocimiento de este diagnóstico entre los médicos, incluyendo sus sesgos y desafíos, puede contribuir a mejorar el tratamiento de los pacientes que padecen esta condición clínica.”, puntualizó el psiquiatra Julio Torales.
