“Desafortunadamente, solo 25 % de las personas con diabetes tipo 2 logra los objetivos meta y 75 % de ellos desarrollarán complicaciones crónicas que mermarán su calidad de vida”, lamentó este martes Josafat Camacho, presidente médico de la Federación Mexicana de Diabetes.
En una conferencia de prensa, el también médico internista destacó que, actualmente, México ocupa el sexto lugar de los países en el mundo con el mayor número de personas con diabetes.
"Estimamos que actualmente 10,3 % de la población en México (unas 13 millones de personas) vive con esta condición y uno de cada dos no son conscientes de que viven con ella", precisó.
Recordó además que en 2019 la diabetes causó 4,2 millones de muertes en el mundo y fue responsable de al menos 760.000 millones de dólares en gastos de salud; 10 % del total global gastado en atención médica.
Josafat explicó que esta enfermedad disminuye la calidad de vida de los pacientes, pues tres de cada cinco desarrollarán enfermedad renal e insuficiencia cardíaca y 36 % desarrollarán insuficiencia cardíaca.
Adicional, se estima que, actualmente, 54,5 % de las personas con diabetes tienen una visión disminuida, 11 % tienen daño en la retina, mientras que 10 % pierden la visión por completo y 16 % padecen neuropatía diabética, una condición que les puede llevar a perder una extremidad.
Fomentar la prevención
Es por ello que el especialista señaló que se deben buscar medidas preventivas que eviten daños en el corazón y los riñones "con el fin de preservar el mayor tiempo posible el funcionamiento óptimo de ambos órganos".
Camacho indicó que el mejor enfoque para el tratamiento de la diabetes es el llamado cardio-renal-metabólico, esto significa buscar, además de un control metabólico o de la glucosa, un beneficio cardiovascular y protección renal desde el principio.
El control glucémico, afirmó, debe alcanzarse pronto para prevenir el daño debido a la memoria metabólica.
Además, añadió, que alcanzar valores de hemoglobina glicosilada menores de 6,5 % durante el primer año ayuda a conseguir beneficios notables en la prevención de complicaciones renales y de otro tipo a largo plazo.
Un adecuado control de la glucosa, particularmente en las etapas iniciales de la diabetes, ayuda a prevenir complicaciones renales y cardiovasculares a futuro.
Por esto, es importante realizar visitas periódicas al médico y seguir puntualmente sus recomendaciones cuando se diagnostica al paciente con diabetes.
Jorge Medina, coordinador de educación de la Asociación Mexicana de Diabetes en Jalisco, señaló que es indispensable controlar factores de riesgo, además de modificar los estilos de vida.
“Se requiere una alimentación saludable, mantenerse activo, automonitorearse la glucosas y llevar un adecuado tratamiento farmacológico”, aseveró.