Estilo de vida saludable para mantener mente y cuerpo sanos

Llevar una vida saludable hará que aumentes tu expectativa de vida. Seguro que conocés, ya hiciste o escuchaste todo tipo de dietas y planes de alimentación; algunos te habrán resultado y otros no. La idea es llevar un estilo de vida que puedas mantener a lo largo de tu vida, que disfrutes, que te de energía y te genere mayor potencial. Que te lleve a tu mejor versión.

“Cuando se habla de mantener un peso saludable se debe planificar para todo el año y no solamente para una temporada, porque los malos hábitos predisponen a muchas enfermedades y el aumento del peso corporal es la punta del iceberg”.
Tener una mente positiva tiene grandes beneficios en la salud física y mental, además de una dieta saludable.Archivo, ABC Color

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La licenciada en nutrición, Betharram Scarone manifiesta que desde hace tiempo trasmite la idea de volver a lo natural, a los alimentos frescos elaborados en casa.

Sea cual sea la alimentación de la persona (omnívora, vegetariana, libre de gluten , sin lácteos, etc.) propone buscar un estilo que la mujer o el hombre pueda mantener a lo largo de su vida, que disfrute, que tenga energía y le genere mayor potencial. Que los lleve a su mejor versión.

Plan para mejorar la alimentación y el cuerpo

  1. Hidratación: elegir el agua como bebida diaria.
  2. Elegir alimentos frescos: productos en lo posible de granja, vegetales y frutas de temporada y agroecológicas. Evitar los ultraprocesados ya que contienen mayor cantidad de sodio, conservantes y aditivos.
  3. Eliminar alimentos a los que puedas ser intolerante.
  4. Las bases están en un estilo de alimentación mediterránea. La alimentación mediterránea se caracteriza por combinar alimentos de buena calidad, formas de cocinar propias de cada lugar, comidas compartidas y obviamente es muy importante el ejercicio físico.
  5. Colores y variedad. Evitar la monotonía, en los colores están las distintas vitaminas y minerales.
  6. La medida justa para cada uno. Evitar el exceso por más saludable que sea el alimento.
  7. Nutrirnos no solo de alimentos de buena calidad sino también nutrirnos de buenas relaciones, con uno mismo y los demás. Darnos prioridad y reconectar contigo mismo.

Sobre la alimentación mediterránea

Alimentación mediterránea.
Alimentación mediterránea.
  • En éste tipo de alimentación se destacan los vegetales, frutas, legumbres, ajo, cebolla y hierbas aromáticas como condimentos frecuentes.
  • Vegetales, frutas y legumbres aportan alto contenido en fibra, buen aporte de vitaminas, antioxidantes y minerales.
  • Frutos secos y semillas aportan grasas mono insaturadas, fibra y vitamina E.
  • El aceite de oliva como grasa principal. Este aceite está compuesto por ácido oleico, así como también por sustancias antioxidantes. El alto contenido en ácido oleico es beneficioso para mejorar el perfil lipídico.
  • Proteínas animales moderadas. Eligiendo más variedad de pescados y carnes blancas antes que otro tipo de carnes. El huevo también es maravilloso por su aporte en proteína “limpia” y su versatilidad en cuanto a preparaciones.
  • Agregar cereales integrales que aportan más fibra, vitaminas y minerales que los cereales refinados.

Mente sana: minimiza las emociones negativas

Las emociones negativas deben ser correctamente manejadas para tener una vida plena. Uno de los principales factores emocionales negativos de estos tiempos es el famoso estrés.
Las emociones negativas deben ser correctamente manejadas para tener una vida plena. Uno de los principales factores emocionales negativos de estos tiempos es el famoso estrés.

Para la nutricionista, tener una mente positiva tiene grandes beneficios en la salud física y mental. Las emociones negativas deben ser correctamente manejadas para tener una vida plena. Uno de los principales factores emocionales negativos de estos tiempos es el estrés.

El estrés excesivo baja las defensas y aumenta el riesgo de sufrir enfermedades, además de hacernos sentir mal. El estrés no solo puede tener efectos psicológicos y físicos directos, sino que también puede dirigirnos hacia un estilo de vida poco saludable.

Además, el estrés crónico puede aumentar la presión arterial, causar ansiedad, depresión y problemas cardiacos.

Betharram Scarone, licenciada en Nutrición.
Betharram Scarone, licenciada en Nutrición.
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