Cómo afecta el golpe de calor a las embarazadas

El clima de nuestro país nos lleva a cambios bruscos de temperatura. Cuando hay un calor insoportable entre los 40 y 42 grados, las mujeres embarazadas deben extremar los cuidados para evitar un golpe de calor: no salir a las calles en horas de mucho calor, tomar más de dos litros de agua diariamente para el normal del organismo, por ejemplo. El aumento de la temperatura del cuerpo, cansancio, dolores de cabeza y complicaciones para respirar son síntomas de golpe de calor afirma el Dr. Raúl Fanego Rodríguez.

Las altas temperaturas agudizan algunos síntomas frecuentes de las embarazadas, como el cansancio, la fatiga, dolores de cabeza y aumento de la temperatura especialmente en el último trimestre de gestación.
Las altas temperaturas agudizan algunos síntomas frecuentes de las embarazadas, como el cansancio, la fatiga, dolores de cabeza y aumento de la temperatura especialmente en el último trimestre de gestación.Shutterstock

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El Dr. Raúl Fanego, especialista en ginecología del Hospital General de San Lorenzo (Calle’i), comenta que durante el embarazo, a medida que van pasando las semanas de gestación y avanza el embarazo, en el cuerpo de la mujer se genera un calor extra, por eso es que las embarazadas refieren que siente mucho más calor.

“Las embarazadas tienen síntomas frecuentes, tienen un cansancio extra, principalmente cuando el embarazo está terminando en el tercer trimestre cuando ya la panza esta más grande, obviamente sienten fatiga se cansa más fácilmente les cuesta respirar, a veces se deshidratan, tienen taquicardia. Con el calor extremo que hace en nuestro país, estos síntomas que por lo general tiene son habituales en una mujer embarazada en cualquier momento se agudizan, se agravan y son motivo de consultas frecuentes principalmente por Urgencias”.

“El golpe de calor es una situación en la cual se debe tener cuidado porque colapsa el funcionamiento normal del organismo. Esto inclusive tiene consecuencias tanto para la madre como para el bebé porque puede nacer antes de la fecha de término, o sea, prematuro. Hay que extremar los cuidados, cuidar los horarios en que se sale a la calle, no salir en horas pico de mucho calor, hidratarse bien, y evitar también los ejercicios en horas de mucho calor”, señala el médico.

¿Cuáles son los síntomas de un golpe de calor en una embarazada?

Son la subida de la temperatura corporal o la presencia de febrícula, la piel rojiza sin motivo, la subida de la frecuencia cardíaca con palpitaciones o taquicardia, mareo, sueño, fatiga y vómitos, entre otros.

Raúl Fanego Rodríguez, médico cirujano, especialista en ginecología y obstetricia.
Raúl Fanego Rodríguez, médico cirujano, especialista en ginecología y obstetricia.

¿Las embarazadas sienten más calor?

Los sofocos en el tercer trimestre del embarazo se relacionan con el aumento de trabajo del metabolismo de las mujeres. Conforme avanza la gestación, los vasos sanguíneos se dilatan, la irrigación de sangre es mayor y el cuerpo genera un calor extra.

¿Cómo afecta el calor durante el embarazo?

Las altas temperaturas agudizan algunos síntomas frecuentes de las embarazadas, como el cansancio y la fatiga, especialmente en el último trimestre de gestación. Asimismo, el calor puede conllevar a una deshidratación, taquicardia y fallos circulatorios.

Sufrir un golpe de calor en el embarazo conlleva ciertos riesgos tanto para la mamá como para el feto. Las altas temperaturas son perjudiciales, hasta el punto de que se pueda adelantar el parto y haya un parto prematuro.

¿Qué se debe hacer ante un golpe de calor?

- Colocar a la embarazada en posición semi sentada, con la cabeza levantada de manera que se favorezca la respiración.

- Abanicar y usar un paño húmedo para enfriar la frente, nuca, cuello y brazos.

- Ofrecer pequeños sorbos de agua fresca para hidratarle.

- Acompañarla al centro de salud más cercano.

Recomendaciones:

- Hidratación de forma constante, llevar siempre una botella y beber entre 2 a 3 litros al día.

- Consumir bebidas azucaradas o zumos naturales para evitar posibles bajadas de tensión. Consumir muchas frutas y tener una dieta equilibrada y liviana.

- Mantenerse en lugares frescos y evitar los lugares donde hay muchas personas.

- Usar ropa ligera de algodón y colores claros, que absorban menos calor.

- Evitar exponerse al sol, o hacer ejercicios entre las 11 y 16 horas.

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