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La ola de delincuencia está instalada en Ciudad del Este, con asaltos que desafortunadamente forman parte de la vida cotidiana en los últimos meses y que afectan desde a pequeños comerciantes y ciudadanos a pie hasta a empresarios. Los atracos son cada vez más violentos y en algunos casos tienen desenlace fatal.
Rigoberto Chamorro, presidente de la Cámara de Empresarios de Ciudad del Este & Alto Paraná, dijo que los esteños están con miedo de salir de sus casas, ya que no saben lo que les espera en la calle.
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“Personal de mi empresa, en menos de 20 días, ha sufrido dos asaltos. Estamos en tierra de nadie”, sostuvo Chamorro, cuya empresa fue atracada de forma violenta por un grupo comando que se llevó la caja fuerte de un supermercado del Área 3, el pasado 19 de febrero.
El empresario recordó que cuando Santiago Peña asumió la presidencia se acercaron para exponer la preocupación del gremio ante la creciente ola de delincuencia que azota la región con asalto a farmacias, a las despensas de los barrios. “Ahora los delincuentes están manejando totalmente nuestra ciudad”, reforzó.
Según el empresario, la sensación de inseguridad es latente en Ciudad del Este y mucha gente quiere renunciar al trabajo por el temor a la delincuencia. Mencionó que en su empresa renunciaron dos colaboradoras del sector administrativo.
Barrida en cuadro policial
Chamorro sostuvo igualmente que el cuadro policial en Ciudad del Este está contaminado en un 70% y la primera medida debería ser una barrida en la Policía.
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“Los policías nos tratan como delincuentes a los trabajadores y les apoyan a los delincuentes. Acá primero hay que sanear el cuadro policial, comenzando desde la cabeza hasta abajo, porque está muy corrompida esta gente; habrá buenos, pero pocos”, acotó.
El gremialista manifestó que no se percibe la presencia de los policías en las calles y que no saben si hay personal suficiente para garantizar la seguridad de la población.
“Tenemos que salir a las calles a manifestarnos, porque esto que pasó... Ya hubo muerte de un joven que lamentar. Estamos muy indignados por estas cosas, estamos mal, me dan ganas de llorar, mucha impotencia te da”, puntualizó Chamorro.