Los policías liberados son Mauricio González Flor (24), José Javier López Ybarra (30), quienes están imputados por extorsión, privación de libertad, asociación criminal y producción inmediata de documentos públicos de contenido falso. Los mismos habían sido procesados junto a Richard René Rojas Vera (26) y Pedro Antonio Blanco González (35) por la la fiscal Zunilda Ocampos

Los uniformados son sindicados de realizar un allanamiento irregular para extorsionar a una pareja y exigir una supuesta coima de 10.000 dólares americanos.

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El 24 de agosto pasado, González Flor y López Ybarra fueron puestos a disposición del Ministerio Público para la audiencia indagatoria. Luego fueron imputados por la fiscala Zunilda Ocampos, quien además pidió la prisión preventiva para los uniformados.

Según la resolución del juez Soto, la comunicación sobre la detención preventiva de los procesados fue fuera del plazo por lo que dispuso la libertad de los mismos. Llamativamente, el juez fijó la audiencia de ser oído recién para el viernes próximo. Es decir, recién el viernes resolverá si decreta o no la prisión preventiva de los uniformados.

La fiscala Ocampos presentó un recurso de apelación contra la resolución judicial que dispone la libertad de los uniformados. Alegó que el Ministerio Público puede fijar un plazo distinto, en casos excepcionales como en este caso, considerando que en la audiencia indagatoria presentaron varios elementos que debieron ser analizados.

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En cuanto a los otros dos procesados están privados de su libertad en Asunción, a raíz de otra denuncia de procedimiento irregular.

Antecedentes del caso

Según la investigación, los hechos ocurrieron presumiblemente el 16 de mayo de 2023, a las 15:00 horas, en una vivienda ubicada en el kilómetro 9,5 de Monday de Ciudad del Este. En esa ocasión, los cuatro agentes del orden, que prestaban servicios en el Departamento de Investigación de Delitos de Alto Paraná, ingresaron ilegalmente a la vivienda de Alex Junior Mereles Ortigoza y de su pareja Rosario Soledad Escobar.

Habrían sacado al hombre a la fuerza, tras golpearlo en diferentes partes del cuerpo. Seguidamente, le exigieron presuntamente 10.000 dólares para no involucrarse con el tráfico de drogas y evitar ponerlo a disposición de las autoridades judiciales. Luego bajaron sus pretensiones a 35 millones de guaraníes.

Sin embargo, Rosario Soledad acudió al Ministerio Público y radicó la denuncia contra los miembros de la fuerza pública. Al enterarse de esta situación, los policías llevaron a Alex Junior Mereles hasta la base policial y presuntamente fraguaron un informe en el cual asentaron que detuvieron al hombre supuestamente tras una persecución. Además, dijeron que de su poder incautaron varios kilos de marihuana.